Redacción El País
Retomar una relación amorosa no significa volver al mismo punto, sino aprender de los errores del pasado, sanar heridas emocionales y construir un vínculo más sano, especialmente cuando hay hijos de por medio.
Las razones para volver pueden ser variadas: un amor que persiste, el miedo a la soledad o la añoranza por la vida en común. Sin embargo, la base fundamental debe ser el perdón genuino y el reconocimiento de las responsabilidades de cada uno en la ruptura, con un firme compromiso de evitar los errores pasados.
¿Cómo afecta un divorcio a los hijos?
Un divorcio implica cambios profundos para los niños, como cambiar de colegio o residencia, lo que impacta directamente en su desarrollo y ajuste social. Además, pueden sufrir el fenómeno de la alienación parental si se les fuerza a tomar partido o a ver negativamente a uno de sus progenitores.
Claves para una reconciliación exitosa con hijos
Para las parejas que se guardan respeto y desean intentarlo de nuevo, se recomienda encarecidamente acudir a un terapeuta. La terapia de reconciliación ayuda a:
- Trabajar las emociones y comprender el deseo de volver a estar unidos.
- Aprender nuevas formas de resolver conflictos.
- Reconocer lo positivo de la pareja y sanar resentimientos.
- Construir una nueva relación de pareja, desechando los malos hábitos y creando una nueva identidad.
- Tomar conciencia de que su capacidad para entenderse influye directamente en la felicidad de sus hijos.
¿Convivencia inmediata? No, espere a concluir la terapia
No se recomienda que los padres convivan nuevamente de inmediato. Lo ideal es que primero concluyan el proceso terapéutico y que sus hijos sean testigos de un verdadero cambio en sus actitudes y comportamientos. El regreso al hogar debe generar tranquilidad y expectativas positivas en los niños.
Si la reconciliación no se maneja adecuadamente, el proceso puede ser saboteado por uno de los miembros. Es crucial recordar que si la pareja permanece junta por obligación y "atrapada", solo conseguirá lastimarse más.
En base a El Comercio - GDA