Todas las propiedades nutricionales y curativas que las uvas encapsulan

Redacción El País
Las uvas, una de las frutas más antiguas y cultivadas del mundo, son mucho más que un simple dulce de la naturaleza.
Poseen un perfil nutricional interesante y una serie de compuestos bioactivos a los que se les atribuyen importantes beneficios para la salud, algunos con una sólida base científica y otros aún en estudio.

Aquí una enumeración de tanto sus propiedades nutricionales como los efectos promotores de salud (a menudo llamados "curativos") que se les asocian.

Foto: Unsplash.

Las uvas son un alimento bajo en calorías y rico en agua, pero concentran una notable cantidad de nutrientes esenciales y compuestos vegetales beneficiosos.

· Carbohidratos: Son su principal componente, en forma de azúcares naturales (glucosa y fructosa), que las convierten en una fuente de energía rápida.

· Fibra: Aportan una cantidad moderada de fibra, especialmente si se consumen con piel. La fibra es crucial para la salud digestiva y ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre.

Vitaminas:

• Vitamina K: Esencial para la coagulación de la sangre y la salud ósea.
• Vitamina C: Un potente antioxidante que fortalece el sistema inmunológico y ayuda en la producción de colágeno para la piel.
• Vitaminas del Grupo B (especialmente B6, B1 y B2): Importantes para el metabolismo energético y el sistema nervioso.

Minerales

• Potasio: Fundamental para el control de la presión arterial y la función nerviosa y muscular.
• Cobre: Interviene en la producción de energía y la formación de glóbulos rojos.

Resveratrol: Quizás el compuesto más famoso de las uvas (especialmente las rojas y negras), es un polifenol con potentes efectos antioxidantes y antiinflamatorios. Se concentra en la piel.

Flavonoides (quercetina, antocianinas): Pigmentos que dan color a las uvas y son poderosos antioxidantes. Las uvas moradas y rojas son más ricas en ellos.

Ácidos fenólicos: Otro grupo de antioxidantes.

Foto: Unsplash.

Salud cardiovascular

Presión arterial: El potasio y los antioxidantes ayudan a relajar los vasos sanguíneos, contribuyendo a reducir la presión arterial alta.

Colesterol: Los antioxidantes, especialmente los flavonoides, pueden ayudar a prevenir la oxidación del colesterol "malo" (LDL), un paso clave en la formación de placa en las arterias.

Función endotelial: Mejoran la flexibilidad y el funcionamiento de los vasos sanguíneos.

Efecto antioxidante y antiinflamatorio
La combinación de resveratrol, flavonoides y vitamina C combate el estrés oxidativo y la inflamación crónica, que son la base de muchas enfermedades modernas como el cáncer, la diabetes y las cardiopatías.

3. Salud Cerebral: El resveratrol ha demostrado mejorar el flujo sanguíneo al cerebro y proteger las neuronas. Estudios observacionales sugieren que el consumo de uvas puede ayudar a ralentizar el deterioro cognitivo y mejorar la memoria.

Foto: Unsplash.

Rojas y negras: Son nutricionalmente superiores en el contexto de los beneficios mencionados. Contienen una mayor cantidad de resveratrol, antocianinas y otros flavonoides debido a los pigmentos de su piel.

Verdes: También son saludables y aportan vitaminas, minerales y otros antioxidantes, pero su contenido de resveratrol es significativamente menor.

Las uvas son un alimento funcional con propiedades que van más allá de la nutrición básica. Si bien no son un medicamento y no "curan" enfermedades por sí solas, su consumo regular como parte de una dieta equilibrada (preferiblemente las variedades rojas y negras, y con cáscara) puede ser una estrategia dietética poderosa para:

· Prevenir el desarrollo de enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas.

· Proteger al cuerpo del daño oxidativo y la inflamación.

· Contribuir al buen funcionamiento general del organismo.