El consejo de una nutricionista para disfrutar el pan sin subir de peso: qué tipo de rebanadas elegir

A quienes disfrutan del pan pero temen pasarse con las harinas, la nutricionista María de Lluc les propone una forma simple de seguir comiéndolo sin que eso implique ganar peso. Su propuesta no pasa por eliminar el pan de la dieta diaria, sino por prestar atención a un aspecto que algunos suelen pasar por alto, como lo es el grosor de las rebanadas.

“Puede que parezca una ‘tontería’, pero cuando eres consciente de las rebanadas que escoges, Yo en mi caso elijo las medianas”, agregó de Lluc.

La nutricionista explicó que cuando escoge las rebanadas de pan gruesas, es más probable que termine comiendo varias sin darse cuenta, lo que supone una mayor ingesta calórica. En cambio, si opta por unas más finas o medianas, está ingiriendo la misma cantidad, pero con menos calorías.

“Cuando escoges las gruesas, puedes terminar comiendo tres o más, y esto significa mayor cantidad de calorías, lo que hace que suba de peso más rápido. Pero si optas por las finitas, estás comiendo lo mismo, pero con menos calorías”, argumentó.

María de Lluc señaló que muchos excesos alimentarios comienzan en el supermercado sin que las personas lo noten, pero algo en lo que insistió mucho es que las personas deben ser selectivas a la hora de comprar el pan.

Foto: Freepik.

Su estrategia no se basa en restringir este alimento, sino, todo lo contrario, en elegir bien las rebanadas sin necesidad de dejarlo de lado. Aunque sí recomendó que su ingesta debe ser con moderación, para así evitar problemas a futuro.

Para María de Lluc, esta apuesta en nutrición es accesible y realista, para aquellos cuyo alimento favorito es el pan, pero que temen ingerirlo porque piensan que van a subir de peso.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo ideal es que las personas consuman unos 250 gramos de pan al día, el cual las puede dividir en unas cuatro raciones de 50 o 60 gramos.

Además, uno de los mitos que ha ganado popularidad es que el pan integral aporta menos calorías que el blanco, algo que no es del todo cierto. Aunque contiene más vitaminas, ácidos grasos y, sobre todo, fibra, engorda igual que el pan blanco.