5 hábitos respaldados por la neurociencia para entrenar el cerebro y mejorar la memoria a cualquier edad

Redacción El País
¿Te pasa que abrís la heladera y olvidás qué ibas a buscar? ¿O que las llaves desaparecen misteriosamente cuando más apurada estás? La memoria, esa capacidad de registrar, guardar y recuperar información, es mucho más que recordar datos: es fundamental para aprender, decidir y comunicarnos.

Con el paso de los años es normal que esta habilidad se resienta, pero la buena noticia es que se puede entrenar. El Centro de Neurología Avanzada (CNA) compartió cinco hábitos sencillos, respaldados por la neurociencia, para mantener el cerebro activo y proteger la memoria en cualquier etapa de la vida.

Aprender un idioma nuevo, animarse a tocar un instrumento o cambiar el recorrido habitual al manejar son desafíos que estimulan el cerebro. Estas acciones ayudan a generar nuevas conexiones neuronales, lo que mejora la capacidad de recordar y adaptarse a situaciones distintas.

Charlas con amigos, encuentros familiares o participar en actividades grupales no solo son buenos para el ánimo, también ejercitan la mente. El aislamiento, sobre todo en personas que viven solas, puede favorecer el estrés y la depresión, factores que aceleran el deterioro cognitivo.

Un ambiente organizado contribuye a que la mente también lo esté. Tener lugares fijos para las cosas, anotar las tareas y decir en voz alta lo que se debe hacer son estrategias que facilitan la retención y previenen olvidos. Además, reducen el estrés diario.

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Leer todos los días –sea un libro, una nota o hasta una historieta– estimula la atención, amplía el vocabulario y potencia el procesamiento de información. Estos beneficios se traducen en una memoria más ágil y duradera.

Dormir lo suficiente, comer equilibrado y controlar enfermedades crónicas como hipertensión o diabetes también es clave para la memoria. A eso se pueden sumar actividades como escribir a mano, escuchar música, reír, cantar, explorar lugares nuevos o practicar hobbies que requieran concentración. Todo lo que desafíe distintas áreas del cerebro suma puntos a favor.