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MAGDALENA CABRERA

La hermana Lourdes, de la Congregación Oblatas del Santísimo Redentor, quien se encarga de confeccionar las bandas presidenciales, visitó la semana pasada la chacra de José Mujica para tomarle las medidas de la banda que lucirá el próximo 1° de marzo.

Con 85 años de edad, esta será la quinta banda presidencial que confeccione. La primera fue la de Luis Alberto Lacalle.

En 1938 las hermanas Oblatas del Santísimo Redentor bordaron por primera vez la banda del entonces presidente electo, Alfredo Baldomir y a partir de allí se les asignó este encargo. Las primeras veces, Lourdes se limitaba a observar la tarea, hasta que en 1989 la responsabilidad cayó plenamente en sus manos.

Cansada de dar notas a los medios cada cinco años para "contar siempre lo mismo" esta vez tomó la determinación de no hacerlo. Sin embargo, la insistencia de los periodistas le ganó y la hermana terminó aceptando entrevistas solamente por teléfono.

Según contó a El País, en la tarde del martes pasado se trasladó hasta Rincón del Cerro en un auto de la congregación. Su visita a la chacra no duró más de 20 minutos. Le tomó las medidas a Mujica y nada más.

"Es un hombre de pocas palabras, más bien callado". Fue la impresión que se llevó del futuro Presidente, a quien le preguntó dónde quería el escudo "si más alto o más abajo" y la respuesta que recibió fue "como usted quiera". Un poco más de diálogo tuvo con su esposa Lucía Topolansky, quien la recibió y despidió "muy bien". Con ella habló de "cosas de poco interés, nada de importancia, como del tiempo y de la propia banda".

CONFECCIÓN. La banda presidencial se confecciona con seda blanca y celeste y sobre ella se borda el escudo nacional con hilillos de oro o dorados. "Son todas iguales, lo que cambian son las medidas", aclaró, aunque prefirió no adelantar las del presidente electo porque no las recordaba bien. "Las escribí en un cuaderno y lo guardé. Si no me acuerdo de la medida exacta no la voy a decir porque esas cosas son delicadas. A lo mejor digo un poco más y no le gusta (a Mujica)".

"Cuando comience a hacerla, saco el cuaderno y ya está", manifestó, al tiempo que aclaró que el trabajo lo comenzará a hacer después de año nuevo. Antes no porque recibe la visita de muchas ex alumnas y la labor se le complica. "Hago unas puntadas y tengo que dejar, entonces, para mayor facilidad empiezo después de fin de año".

Tampoco se atrevió a poner una fecha de finalización, ya que no sabe cuántas horas al día le podrá dedicar a este trabajo, pero no cree que le lleve más de un mes. Una vez terminada la banda tendrá que volver a la chacra para hacerle una prueba a Mujica y verificar que todo esté bien de cara al 1º de marzo.