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A la opinión pública

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IGNACIO ALCURI

Antes que nada quiero tranquilizar a mis parientes y amigos. No desaparecí de la faz de la tierra. Estoy bien, y el silencio de estos últimos días tiene una sencilla explicación, que conocerán leyendo este comunicado que envíe a los medios de prensa.

Decidí tomarme unos días para la reflexión debido a temas relacionados con la disciplina en la que me destaco. No estaba en Brasil, como dijeron por ahí. ¿Qué voy a ir a hacer a Brasil? Si odio las playas, las frutas tropicales y las faveladas. Estaba en casa, leyendo enciclopedias y tomando importantes decisiones sobre mi futuro profesional.

Muchos de ustedes saben que juego al Trivial Pursuit desde hace más de quince años. Comencé a jugar con el tradicional pasatiempo de preguntas y respuestas cuando mi tío abuelo lo trajo de Buenos Aires. Como las preguntas argentinas eran bastante complicadas, me vi obligado a estudiar y buscar información. Así arrancó mi entrenamiento.

El resto de la historia es más que conocido. Gané un par de juegos importantes contra nerds de Sudamérica, lo que me permitió competir por el Juvenil Junior Mini Jovencito Trivial of the World. Por suerte esta categoría fue creada por un uruguayo, así que con 29 me seguían considerando Juvenil.

Las imágenes de mi victoria por K.O. (seis quesitos contra ninguno de mi rival) recorrieron el país. Recuerdo al rector de la Universidad, ronco de tanto gritar "¡Uruguay Campeón del Mundo!"

Así me convertí en un referente de los juegos de caja. Y recibí el apoyo de los sponsors, a quienes agradezco, particularmente a Diccionarios Enciclopédicos "Ralousse", Quesería Devos Sinmí y la empresa de telefonía celular de los uruguayos, por supuesto. Ellos siempre estuvieron para darme una mano.

Actualmente estaba entrenando para enfrentar el mes que viene a un japonés de 13 años, por el título Juvenil No Tan Junior Aunque Bastante Mini Trivial of the World. Pero actuando en defensa de mi integridad mental, mejor calidad de promotores y aumento en las remuneraciones, decidí postergar el encuentro, para organizarlo en conjunto y con personas más calificadas, que se preocupen por los nerds que ponen en riesgo su cerebro cada vez que tiran los dados.

Es cierto que mis antiguos entrenadores me aconsejaban el orden en que debía contestar las preguntas de quesito, o cuándo me convenía cortar por la mitad del tablero. Pero a la hora de contestar cuál es la capital de Mongolia, yo era el que decía "Ulán Bator".

Por eso decidí dar este quesazo contra la injusticia en los juegos de preguntas y respuestas.

Fui contactado por gente muy interesada en que yo enfrente cada duelo en las mejores condiciones. Hasta me ofrecieron un tablero oficial de Trivial Pursuit, porque hasta el mes pasado yo entrenaba en uno dibujado con crayolas sobre una hoja de papel fanfold.

Ellos están recomendados por amigos míos, conocidos profesionales del Pictionary, el Bata Bata y el Garcon Equilibrista. Trabajan con ellos desde hace años y me aseguraron que velarán por mis intereses.

En los próximos días daré una conferencia de prensa, donde voy a aclarar todo lo ocurrido, además de anunciar la fecha en la que me enfrentaré al mencionado púber japonés.

Mis nuevos managers están negociando la venta de los derechos televisivos de esa partida a Utilísima Satelital o Canal (á). Ya me dijeron que en caso de que ocurra, me tocará una buena porción de la bolsa. Como dos o tres quesitos del total.

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