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«Cada vez creo más en los vínculos entre las personas para llegar al éxito»

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Clave. Es necesario preparar la tolerancia a la frustración y enseñar lo efímero y circunstancial del éxito, resaltó. (Foto: Darwin Borrelli)

Fabián Coito, técnico de la Selección Uruguaya sub-20 disertó en el reciente Smart Talent Day.

«Nuestra tarea es detectar el talento pero sobre todo desarrollarlo, no separar el jugador de fútbol de la persona, sino contemplar esas dos partes como una sola», remarcó Fabián Coito, director técnico de la Selección Uruguaya de fútbol sub-20 al definir su tarea a la hora de formar un equipo y desarrollar talentos. Coito refiere a que no siempre contar con el talento innato implica que se puede llegar a ser un profesional de élite.

El entrenador fue parte del Smart Talent Day, evento realizado el pasado fin de semana. A continuación un extracto de la entrevista que mantuvo con El Empresario.

¿Cómo elige a sus jugadores?

—Llegan a la Selección porque juegan bien al fútbol y sus entrenadores los eligieron. Ahí comienza nuestro trabajo, desarrollar al futbolista, considerar a la persona por encima de todo, que tenga valores, respeto, tolerancia a la frustración, espíritu de superación personal y sobre todo compromiso con el grupo y eso supone dejar cosas personales de lado. Jugar bien al fútbol es necesario, pero no suficiente para transformarse en un jugador de nivel. Por otra parte, un capitán no debe ser alguien impuesto, tiene que ser solidario, compañero, que tenga influencia en el grupo, y por supuesto jugar bien. Busco que respete al compañero, al entrenador, al rival, al árbitro. También debe tener la capacidad de luchar por el grupo, que pueda venir y plantearme temas del grupo.

—¿Cuál es la táctica para hacer que equilibren las aspiraciones personales con las del equipo?

—Hay que tener mucho vínculo. Él éxito de una organización tiene que ver con tener personas capaces para el éxito, pero cada vez más creo en los vínculos y el relacionamiento entre las personas para llegar a ese éxito.

—¿Cómo maneja el fracaso y el éxito en el grupo?

—El fracaso lo ves, es ahora, un momento determinado, por lo que hay que ir preparando la tolerancia a la frustración, hacer entender que en las opciones está ganar o perder, quedar en la lista o no. Siempre les digo a los jugadores que parece que están muy cerca de sus sueños y aspiraciones, que imaginan que se les va a dar pero las estadísticas muestran que no todos llegan, lo lindo es que nadie sabe quién y eso depende de cada uno.

En tanto, la deformación que provoca el éxito se va dando en un lapso amplio de tiempo. El entrenador debe enseñar lo circunstancial y efímero del paso por el éxito del deportista, que se entienda que todo esto para lo que nos preparamos y entrenamos es un pasaje corto y enseguida viene otro nuevo desafío. Y es muy difícil porque muchos se quieren instalar en el éxito para sacar los privilegios posibles. Hacemos talleres grupales para que se visualicen en el futuro y cómo van a encarar esa situación porque, por ejemplo, el pase al exterior lo ven como idílico pero implica variables que no visualizan. Yo lo veo en mis hijos jóvenes que quieren trabajar en un lugar cómodo, lindo y ganar bien, pero no tienen en cuenta lo que hay que hacer para que eso suceda y la exigencia de estar en un lugar así. Hay que desear lo mejor pero mentalizarse para lo peor.

—¿Que opina que los jóvenes estén todo el día conectados?

—Si uno convive con jóvenes hay que adaptarse a que estén todo el día con el teléfono y en las redes sociales. Por ejemplo, para el último Sudamericano y Mundial comenzamos a enviar videos de compactos de jugadas del rival personalizados por WhatsApp y nos dejó una buena experiencia. Los veían varias veces al día, algunos pedían que enviáramos más o incluso se les ocurría videos de situaciones diferentes. Fue uno de los secretos que nos permitió crecer, profesionalizarnos y estimular el jugador.

—¿Es de delegar tareas?

—Mucho. Creo que delegar es darle importancia a otros integrantes del equipo técnico y sobre todo frente a los ojos de los demás. Siempre busco promover el crecimiento, la capacitación. Por supuesto, sobrevuelo constantemente todo lo que sucede.

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Clave. Es necesario preparar la tolerancia a la frustración y enseñar lo efímero y circunstancial del éxito, resaltó. (Foto: Darwin Borrelli)

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