En un primer recorrido por los talleres de Arquikits es difícil darse cuenta cuál es el producto principal de la empresa. Los estantes están abarrotados de maquetas de edificios y fachadas, pero también de termos, bombillas, tazas, estuches para cartas, posavasos, llaveros y juegos didácticos. "Es que el fuerte de Arquikits son los regalos empresariales personalizados", afirma la arquitecta Rosario Fossati, fundadora de este emprendimiento que funciona en el Centro de Montevideo desde 2006 con siete empleados que son estudiantes de Arquitectura o de Diseño de Interiores.
Fossati comenta que los clientes le encargan regalos por diferentes motivos, tales como celebrar el aniversario de la firma, haber ganado un premio o, el más frecuente, hacer regalos de fin de año. Pueden pedir algo con cierta funcionalidad como un artículo de escritorio, o con fines decorativos como cuadros con la fachada de un edificio. Una vez que el interesado logra explicar lo que quiere transmitir con el obsequio empresarial, el equipo de Arquikits diseña el objeto, arma los prototipos y se los muestra al cliente para asegurarse de haber interpretado su idea. "Terminamos con un producto con el que se siente muy identificado. Además, es único porque no lo volveremos a hacer si la empresa no lo quiere repetir, ni lo ofreceremos en ningún otro lado", puntualiza la arquitecta.
INICIOS. La idea original de Fossati fue crear una empresa asociada a la arquitectura de las ciudades y al patrimonio. Comenzó trabajando para el exterior, básicamente vendiendo maquetas desarmadas a estadounidenses que tienen el hobby de armar maquetas.
La inversión inicial fue de US$ 73.000, de los cuales la empresa aportó US$ 36.500. La otra mitad del capital la obtuvo mediante el Programa de Desarrollo Tecnológico (PDT) que en 2004 llevaba a cabo el Consejo Nacional de Innovación, Ciencia y Tecnología (Conicyt) con fondos del BID. El programa apoyaba económicamente a empresas cuyos proyectos involucraran innovación en productos, procesos, mejoras en la gestión, en la calidad y nuevos servicios tecnológicos, mediante el cofinanciamiento no reembolsable de hasta un 50% del monto del proyecto.
CLIENTELA. Después que el emprendimiento comenzó a funcionar, Fossati encontró que en la producción de regalos empresariales personalizados había una vía más redituable para subsistir. Hoy cuenta con una vasta clientela que va desde instituciones privadas como PriceWaterhouseCoopers hasta la Junta Departamental de Montevideo. Para esos clientes han diseñado fachadas de sus edificios, como son los casos de la Junta y del BROU, así como diferentes artículos de uso y decorativos.
"Es difícil sostener una empresa chica y nacional solamente mirando hacia el exterior", señala la arquitecta. Sin embargo, Arquikits está en tratativas con mayoristas y museos estadounidenses para retomar las exportaciones.
INNOVACIÓN. El material base para la construcción de la mayoría de los productos de Arquikits es la fibra de madera de mediana densidad, más conocida por su sigla en inglés MDF. También utilizan otros materiales como acrílicos, metalex -un material fabricado en Estados Unidos que imita metales-, plásticos de todo tipo, cartón, baldosas, espejos, etc.
Para el tratamiento de los materiales, la empresa posee tres máquinas con tecnología láser que cortan y graban desde el básico MDF hasta el vidrio. A principios de julio se importó un nuevo equipo que escanea sus propios productos -como, por ejemplo, la fachada del Palacio Legislativo o la sede central del BROU- y los reproduce en una escala más pequeña. Esta nueva tecnología logrará reducir los costos y, de este modo, llegar al nuevo público objetivo: el consumidor individual y el turista. El regalo común y el turístico se agregarán a los regalos empresariales y se venderán a través de terceros ya que, como aclara la empresaria, "la venta no es el fuerte de Arquikits, sino la producción".
PROYECTO. A mediados de agosto, Arquikits se embarcará por primera vez en el área educativa, dictando dos tipos de talleres. El primero trabajará desde la perspectiva de la arquitectura sostenible, "integrando los criterios de eficiencia energética y diseño sostenible en el accionar de los agentes públicos y privados que actúan en la construcción de la ciudad", explica la Arq. Fossati. Formarán a los estudiantes en sostenibilidad de proyectos, construcción y mantenimiento arquitectónico que plasmarán en una maqueta final copia exacta del "edificio sostenible" a escala.
El segundo taller, directamente relacionado con el Museo de la Ciudad, estará dirigido a mujeres con dificultades de inserción laboral. Se las capacitará en el armado de maquetas para que luego integren el plantel que desarrolle los productos del Museo. Con el objetivo de obtener apoyo económico para este proyecto, se presentará al llamado que hace Proimujer del Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional.