La intención del ministro Jorge Venegas de designar a la exdirectora del Hospital de Clínicas, Graciela Ubach, en la Dirección General de Secretaría del Ministerio de Salud provocó el enojo del presidente José Mujica.
El pasado lunes Venegas, junto al subsecretario de Salud Pública, Leonel Briozzo, le anunció al presidente Mujica que había tomado la decisión de designar a Ubach (Partido Comunista) como directora general de Secretaría en reemplazo del escribano Julio Martínez (MPP).
Fuentes oficiales aseguraron a El País que la situación provocó el enojo del mandatario. "Las designaciones las hago yo", fue la tajante respuesta de Mujica al planteo del ministro.
El presidente indicó que para cargos de tanta importancia deben acercarle varios candidatos y precisó que él tiene la última palabra.
"No le cayó bien que fueran con la decisión tomada, con todo digerido", dijo una fuente al comentar la reacción de Mujica. Agregó que tampoco resultó del agrado del presidente que el MSP se "pueble" de dirigentes del Partido Comunista, sector al que pertenecen Venegas, el director general de la Salud, Yamandú Bermúdez, Ubach y otros mandos medios diseminados en adjuntos y asesorías del propio ministro.
Anoche El País consultó al ministro Venegas sobre la designación de Ubach, a lo que se limitó a decir "se verá en las próximas horas". Sobre la renuncia de Martínez aconsejó que se le pregunte al implicado. El País llamó a Martínez pero estaba reunido y no respondió.
Fuentes vinculadas al MSP dijeron a El País que con la designación de Ubach "Venegas pretende cerrar el circuito de cargos de su máxima confianza" de los que dependen las decisiones más importantes del MSP. En consecuencia, Mujica dejó en stand by la designación y espera que se le presenten otros candidatos para ocupar el cargo, que es el cuarto en importancia dentro del organigrama del MSP.
PCU AVANZA. Martínez dio a conocer su intención de dejar el puesto hace tres meses, manifestando su disconformidad con una serie de gastos en los que ha incurrido el MSP y a los que no está dispuesto a avalar con su firma. La vacante que deja Martínez se produce en el marco de una permanente tensión en la relación entre el ministro Venegas y el subsecretario Briozzo.
Con la intención de fortalecer su posición en el MSP, Venegas pretende rodearse de personal de confianza proveniente del PCU.
En agosto de 2011 Venegas tomó la decisión de reemplazar a Gilberto Ríos en la dirección general de la Salud y designar en el cargo a Bermúdez. Ambos integran el PCU, pero según afirmó el propio Venegas al Comité Ejecutivo de ese partido, incorporó a Bermúdez porque es de su "total confianza".
Razón similar esgrime para impulsar a Ubach, también del PCU, quien se desempeñó por dos períodos como directora del Hospital de Clínicas -cargo que dejó en diciembre de 2009-, y actualmente es la directora del Instituto Nacional de Ortopedia y Traumatología.
RENUNCIA. El manejo de determinadas situaciones llevó a Martínez a tomar la decisión de dar un paso al costado. Según fuentes del MSP consultadas por El País, se le solicitó que permaneciera en el cargo hasta tanto se encontrara un sustituto. Martínez presentó su renuncia porque está disconforme con gastos que, según ya adelantó, no está dispuesto a avalar. Según las fuentes, el malestar se debe al manejo del Proyecto de Prevención de Enfermedades No Transmisibles (PPENT).
Este programa cuenta con una financiación del Banco Mundial por US$ 23 millones. Según se informó, un reducido grupo de funcionarios percibe salarios por este y otros programas, con lo que acumulan en un mismo mes varios ingresos. "Al cabo del mes ganan más que el propio ministro", comentaron los informantes.
Esta situación ha generado molestias en la interna de la secretaría de Estado debido a las asimetrías salariales, dijeron las fuentes contactadas. Martínez no comparte lo que ocurre con el PPENT y no está dispuesto a avalar con su firma los contratos, expresaron las fuentes. Añadieron que tiene subordinados que ganan más que él.
"Hay funcionarios que cobran en cuatro ventanillas (un sueldo del MSP, otro del PPENT, otro por las comisiones de apoyo y otro por el Patronato del Psicópata) por el mismo trabajo que hacían antes", dijo uno de los consultados.
Las fuentes indicaron que Venegas y Briozzo heredaron el funcionamiento del PPENT de la administración anterior, pero no solo no lo cortaron, sino que lo mantuvieron.
CRÍTICAS DEL MPP. El diputado Álvaro Vega (MPP) cuestionó el rol asumido por el ministro Venegas y dijo que la reforma sanitaria "no tiene un rumbo definido".
Vega dijo a El País que tiene críticas al Sistema de Salud que no están relacionadas con el episodio de los enfermeros asesinos que estalló días atrás. "Mis cuestionamientos son al sistema en general, a lo que está sucediendo y a la falta de soluciones. El ministro no participó en la edificación de ese sistema y ese es un problema para nosotros. Eso no pasaba con Daniel Olesker (Partido Socialista), que participó en la construcción de toda la reforma de la salud. Pero lo que digo no es una crítica, es un dato objetivo de la realidad", afirmó.
Los roces en la relación entre el MPP y el PCU en materia de gestión no son una novedad. En su edición del 21 de marzo, El País dio cuenta de la "mala relación" que mantienen Venegas y Briozzo, la que deriva no solo de las diferencias de estilos de conducción sino que también se alimenta de una puja permanente entre los sectores a los que pertenecen.
Un escenario similar se presentó cuando la extitular del Ministerio de Desarrollo Social, Ana Vignoli, fue removida de su cargo por el presidente Mujica. La implementación del Plan Frío Polar y la muerte de personas en las calles generaron fuertes críticas hacia su accionar desde el MPP. El diputado de ese sector, Alejandro Sánchez, había cuestionado la gestión. "No se cambia a Vignoli porque haya funcionado bien, me parece que había algunas carencias, las que esperamos que se solucionen con la designación del nuevo ministro", dijo. El episodio determinó que Olesker pasara a desempeñarse en el Mides y Venegas fuera designado en Salud Pública para cumplir con la cuota del PCU.