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Julio Bocca presentó oficialmente ayer la producción que cerrará la temporada 2010 del Ballet Nacional del Sodre: El lago de los cisnes; las funciones de este clásico de la danza irán desde el 3 al 14 de diciembre, en el Auditorio Adela Reta.

La coreografía de esta puesta pertenece a Raúl Candal (Argentina), "quien fue una gran figura del ballet estable del teatro Colón, y que tenemos el privilegio de tenerlo en este momento con nosotros", señaló Bocca. Y al frente de la Ossodre estará el joven director Martín García. La producción, al igual que en Giselle, "viene del Colón -agregó- y es la que yo interpreté en mi despedida en el año 2007, en el Luna Park". A su criterio, es "una producción muy hermosa, en la cual todos tienen que bailar, tienen que moverse en todo momento, y casi no hay tiempo para respirar".

Candal, por su parte, explicó que los dos primeros actos están fusionados, al igual que el tercero y cuarto, con un intervalo en el medio. "Tomé como base argumental la creación de Petipa-Ivanov sobre la música de Chaikovski, pero la coreografía es mía, con algunos elementos innovadores", informó el destacado artista argentino.

Los papeles protagónicos serán interpretados por Vanesa Fleitas, Giovanna Martinatto, Rossina Gil, tres jóvenes integrantes de la compañía que ya se han destacado en Giselle y en el programa mixto que la compañía del Sodre llevó a su gira por el interior en el mes de septiembre y, semanas después, presentó en el Auditorio Nacional. Junto a ellas actuarán dos bailarines invitados: José Manuel Carreño, de Cuba, que es primera figura del American Ballet y está a poco de retirarse de la danza, y Avetik Karapetyan, de Armenia, un artista muy joven y con una ascendente carrera internacional.

Las entradas para este espectáculo ya están a la venta a precios muy populares, y para el día 15 de diciembre, agregó Bocca, está confirmada una función extra que será para beneficio de la Fundación Caldeiro Barcia.

De viaje. Además de presentar los detalles de la puesta de El lago de los cisnes, Bocca anunció oficialmente que este jueves el Ballet Nacional, con un elenco de 10 bailarines, parte hacia el Festival Internacional de La Habana, Cuba, que celebrará los 90 años de la maestra Alicia Alonso.

"Vamos con Nuestros valses, de Vicente Nebrada... y estaremos haciendo dos funciones, el 30 y 31". Será una oportunidad, destacó, para compartir el escenario con importantes compañías internacionales. "Para mí es muy importante haber conseguido esta invitación, porque es seguir con el objetivo que tenemos, y también para que la compañía comience a relacionarse con otros pares del exterior, y que se conozcan nuestros jóvenes bailarines, y que se sepa que el Ballet del Sodre está renaciendo".

Paralelamente, el cuerpo de baile se está preparando para la gala que celebrará sus 75 años de vida, y para la que llegarán varias parejas de bailarines invitadas de varios países de la región. Y para el 17 de diciembre, luego de la presentación de El lago de los cisnes, está previsto realizar una función especial en el Teatro de Verano, con un programa que incluirá algunos fragmentos de las obras interpretadas a lo largo de este año.

Otro "Lago" para Bocca. En diciembre de 2007, Julio Bocca se despidió de los escenarios con varias funciones -y a sala llena- en el Luna Park de Buenos Aires, donde bailó un memorable El lago de los cisnes junto al cuerpo de baile estable del teatro Colón. Una obra clásica para una figura entonces (y ahora) también clásica para la danza en el último tramo del siglo XX y comienzos del actual.

El lago de los cisnes, además de ser una de las principales obras del repertorio clásico de la danza, es una creación emblemática del compositor ruso Piotr Ilich Chaikovski (1840-1893). Fue el primero de sus tres ballets (los otros dos son El cascanueces y La bella durmiente) y tuvo su primer estreno en 1877, en el Teatro Bolshói de Moscú, con una coreografía de Julius Reisinger. Pese al prestigio que ya tenía el compositor, el público y la crítica de la época no manifestaron casi ninguna adhesión a la obra.

En 1895, dieciocho años después de aquel estreno, la historia fue muy diferente. Con una nueva coreografía, esta vez creada por el notable maestro y bailarín francés Marius Petitpa y el coreógrafo ruso Lev Ivanov, El lago se reestrenó en el Teatro Mariinsky de San Petersburgo. Y la reacción del público lo convirtió en un notable éxito.

Raúl Candal, ha sido director y protagonista de notables puestas de ballet en el Colón de Buenos Aires como en el exterior; actuó también en el Ballet del Sodre; en 2007 asumió la dirección del cuerpo de baile del Colón, y fue responsable allí de la producción de El lago de los cisnes, con la que se despidió Julio Bocca de los escenarios.