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China supera a Japón como la segunda economía del mundo

Crecimiento. Pekín se fortalece; recesión entorpece el desempeño de Tokio

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TOKIO | AP Y AFP

China se convirtió en la segunda economía del planeta en el segundo trimestre de 2010 en detrimento de Japón, que vio como la recesión mundial le restó ímpetu a su crecimiento y le entorpeció una precaria recuperación, según cifras oficiales.

El gobierno japonés reconoció que el PIB nominal de China fue superior al de Japón en el segundo trimestre (abril a junio): 1,337 billones de dólares contra 1,288 billones de dólares respectivamente, según las conversiones oficiales. Sin embargo, en el conjunto de los seis primeros meses del año, el PIB de Japón fue de 2,578 billones de dólares, contra 2,532 billones de China.

No es la primera vez que China supera a Japón en cifras trimestrales del PIB, pero al hacerlo ahora en el segundo trimestre podría significar un período en que la ventaja sea insuperable. Además, la economía de China será posiblemente más grande que la de Japón a finales del 2010 debido a la gran diferencia en sus tasas de crecimiento. China se expande casi 10% cada año, mientras se prevé que Japón crezca sólo un 3% este año.

Las cifras ponen de relieve el surgimiento de China como una potencia económica que está cambiando todo, desde el equilibrio global en el poderío militar y económico hasta el diseño de automóviles. China es ya el número uno del mundo en exportaciones, compra de vehículos y productor de acero, al tiempo que su influencia mundial crece. De hecho, en Estados Unidos, sostienen que en 2030 podría convertirse en la primera economía del mundo.

Según declaró ayer un experto del Centro de Información del Estado Fan Jianping, el crecimiento de China se desaceleraría en el segundo semestre, ya que Pekín se vería obligado a mantener sus medidas de ajuste del crédito bancario y limitar los gastos destinados a la reactivación. Tras haber crecido 11,9% en el primer trimestre de 2010 y 10,3% en el segundo, la economía china tendría una expansión de 9,2% en el tercer trimestre y 8,0-8,5% en el último, según el experto.

Por otra parte, en el segundo trimestre del año, la economía japonesa sufrió un retroceso del consumo interno que pone de manifiesto un estancamiento en la reactivación. En términos trimestrales, la economía japonesa creció un 0,1% en el período de abril-junio respecto a enero-marzo (+1,1%).

En términos interanuales, el PIB aumentó solamente un 0,4% en el segundo trimestre, en muy fuerte retroceso respecto al 4,4% del trimestre anterior y significativamente por debajo de la previsión del 2,3% pronosticada por los economistas.

"Los efectos de las medidas de reactivación se atenúan" dijo Yoshiki Shinke, del Dai-Ichi Life Research Institute. "Con excepción de la compra de equipamientos de las empresas privadas y las exportaciones, los datos en su conjunto son malos", coincidió un analista de Daiwa Securities.

A pesar de esta situación, el ministro delegado de Economía, Satoshi Arai, dijo que "no es indispensable actuar en lo inmediato" para lanzar nuevas medidas de estímulo de la demanda interna. Lo cierto es que las empresas reducen sus gastos y la masa salarial con el objetivo de lograr precios bajos en un medio ambiente muy competitivo. Con este procedimiento agudizan el fenómeno deflacionista, uno de los factores de los modestos desempeños económicos de Japón.

Resignado, Japón espera ahora que la dinámica China, su principal cliente, le quite en forma duradera la plaza de segunda económica mundial este año o el próximo.

Superada desde un punto de vista estadístico, Japón conservará sin embargo un avance en condiciones y nivel de vida medios, infraestructuras, educación, prestaciones sociales y otros criterios tangibles. Japón está diez veces menos poblado y por lo tanto es diez veces más rico por habitante que China. La cuestión es cómo revivir la actividad económica con una reducción de los activos.

La ecuación es aún más difícil si se tiene en cuenta que el país tiene una deuda gigantesca y corre el riesgo de ver su tejido industrial deshilacharse, como consecuencia de la gran dependencia externa de sus empresas y la excesiva valuación del yen, que empujan a trasladar fábricas al exterior de Japón.

Aparecen dudas sobre el vigor de la reactivación tras la crisis global

PARÍS | La reactivación de la economía mundial ya perdió vigor y, tras la crisis europea de la deuda pública, ahora son las perspectivas norteamericanas a medias tintas, las decepcionantes cifras japonesas y la relativa desaceleración china que parecen amenazar el crecimiento.

El buen desempeño de la zona euro, que registró en el segundo trimestre un crecimiento mejor que el de EE.UU. (1% contra 0,6% con respecto al trimestre anterior), debe ser relativizado, estiman los analistas. En primer lugar, porque "la reactivación había comenzado antes en EE.UU., aunque en forma estructural sigue siendo más débil en Europa", indicó Benjamin Carton, del Centro francés de Estudios Prospectivos e Informaciones Internacionales. En segundo lugar, porque la zona euro debe gran parte de su crecimiento a Alemania, "cuya economía había caído con fuerza a raíz de su integración al comercio mundial y que sólo está recuperándose", según Cédric Tille, del Instituto de Altos Estudios Internacionales y Desarrollo de Ginebra.

Célebre por haber anticipado la crisis financiera de 2008, Nouriel Roubini, juzgaba recientemente que "los riesgos de una nueva recesión en Estados Unidos pasaron de 25% a más de 40%".

"Es cierto que a raíz de su endeudamiento y del fuerte índice de desempleo el consumidor norteamericano ya no está en condiciones de ser el motor del crecimiento mundial", explicó Benjamin Carton. La cuestión del empleo norteamericano es también fundamental para otro experto, Eswar Prasad, del Brookings Institution, ya que "las economías que mejor se comportan, como la china o la alemana, son muy dependiente de las exportaciones" y por ello del dinamismo de la demanda en sus socios comerciales.

Las incertidumbres son muy fuertes para los años venideros. "Podría haber un crecimiento diferenciado entre los países integrados al comercio mundial y aquellos que no lo están", estimó Cédric Tille, subrayando que eso creará "nuevas tensiones en la zona euro". Otra tendencia es que "los mercados emergentes serán los motores del crecimiento mundial al menos durante los próximos tres años", aseguró Carton. AFP

Las cifras

10% Es el crecimiento que se estima alcanzará la economía de China al finalizar el año. La economía de Japón rondará en cambio el 3%.

1,337 El PIB nominal de China en el segundo trimestre del año en billones de dólares. El de Japón fue de 1,288 billones de dólares.

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