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SEBASTIÁN CABRERA

Diez días después del accidente que lo dejó fuera de actividad, Lacalle se reunió ayer con su comando y hoy reaparecerá en forma pública. Será una campaña distinta para el ex presidente, que tomará precauciones especiales para evitar recaídas.

A una cuadra de la avenida 21 de Setiembre, los feriantes desmontaban ayer de tarde los puestos de la feria de los martes de la calle Williman en Punta Carretas. Entre camiones lanzando humo negro y cajones de verduras, el inspector Freddy Kuster y varios responsables de comunicación de Unidad Nacional (UNA) esperaban en la vereda la llegada del precandidato Luis Alberto Lacalle.

Allí, en la calle Williman, está la sede del Instituto Manuel Oribe. Algo de nerviosismo se palpaba en el ambiente: el ex presidente realizaba la primera reunión de su comando después del accidente, para preparar la nueva agenda y la "reentré" del precandidato, que se concretará esta mañana en el Hotel Radisson.

La cita era a las 15.30. El comando se reúne habitualmente en la sede de la UNA en 18 de Julio, pero se cambió el lugar de encuentro debido a que en ese sitio hay "unas escaleras tremendas", según explicaría Lacalle a El País más tarde.

Media hora antes, el senador Gustavo Penadés fue el primer miembro del comando en llegar. "¿Dónde se va a sentar Lacalle?", le preguntó a Kuster, responsable de la seguridad del ex presidente. El inspector señaló la cabecera de una larga mesa y luego contó que el día anterior le había avisado a Lacalle que los martes hay feria frente al Instituto Manuel Oribe y que se complicaría el acceso a la casona. "Pero quiso hacerlo igual", dijo Kuster.

En lugar de su tradicional camioneta, Lacalle llegó en un automóvil Chevrolet Vectra con vidrios polarizados. Sentado en el asiento de atrás, se bajó con el apoyo de sus bastones canadienses. En la pierna tiene una férula que se saca y se pone y suplanta al tradicional yeso. Lacalle caminó raudo y serio hacia el instituto. En el medio, levantó uno de los bastones y saludó a dos feriantes que recogían cajones y lo reconocieron.

CUIDADO. "La vida continúa. Ahora no paramos más, con las lógicas prevenciones de no tener que subir 50 escaleras, ni que te apretujen, empujen y tiren al piso en un acto", contó Lacalle. El ex presidente hará su regreso esta mañana en un seminario sobre tecnologías de la información y comunicación.

Todas las actividades de esta semanas serán en Montevideo o en el área metropolitana, evitando grandes desplazamientos. Las idas al interior quedan para la próxima semana (ver recuadro). Lacalle piensa tomarse la campaña con la misma energía que antes, pero tomará en cuenta las indicaciones que le hizo su médico Fernando Motta. "No impiden el desplazamiento, pero lo hacen más complejo. Tenemos que cuidar no sufrir un retraso por un tropezón o una caída. La convalecencia va muy bien. No le voy a dar la alegría a nadie de morirme ahora", bromeó Lacalle.

Dentro del instituto, el ex presidente se movió sin los bastones que en la calle le dan más seguridad. El senador Luis Alberto Heber lo vio "como nunca, perfecto". ¿El accidente puede afectar la imagen del precandidato? Heber contestó: "No creo. La gente verá que Lacalle no afloja".

El senador Francisco Gallinal, en tanto, dijo el lunes de noche en un acto en Paso Carrasco que "el tordillo se nos mancó hace unos diez días pero ya está preparándose para volver a la cancha". Y apuntó: "El primer diagnóstico que hizo el médico es que la cosa era complicada, que tendríamos para un tiempo prudencial, pero Lacalle enfrenta la adversidad y hoy está en un proceso de recuperación que es más espiritual que físico. Ese es el presidente que queremos".

Todas las agrupaciones que apoyan a Luis Alberto Lacalle organizarán este sábado el primer acto conjunto en Montevideo: será en el club Stockolmo. La próxima semana, el presidente volverá al interior y las primeras paradas serán Rocha, Cerro Largo y Treinta y Tres. Después de rearmar la agenda con su comando, Lacalle se reunió ayer en su casa con allegados para definir detalles de la reaparición hoy en el Hotel Radisson.