1/2:  20080924 600x439 ()

2/2:  20080924 536x462 ()

EE.UU. | DANIEL HERRERA LUSSICH

Las declaraciones de Guido Antonini ayer en una Corte Federal de Miami comprometieron aun más a los gobiernos de Argentina y Venezuela en el escándalo de la valija con US$ 800.000, que salpica en Uruguay.

Antonini, un enigmático empresario venezolano de 47 años con ciudadanía estadounidense, declaró ayer que luego de que le incautaran el dinero al llegar a Buenos Aires en agosto de 2007 en un vuelo desde Caracas, se enteró que había otra maleta con US$ 4,2 millones. En ese vuelo viajaban funcionarios de la petrolera venezolana Pdvsa y de la empresa estatal argentina de energía Endesa.

Según grabaciones aportadas por el FBI, los US$ 800.000 estaban destinados a la campaña electoral de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, versión que el gobierno argentino niega.

Antonini fue descubierto en Aeroparque portando una valija con US$ 800.000 sin declarar en la madrugada del sábado 4 de agosto de 2007. El lunes 6 el presidente venezolano Hugo Chávez visitó Argentina y se refirió a la esposa del entonces presidente Néstor Kirchner, Cristina Fernández, como la "futura presidenta de los argentinos". Y el martes 7 Chávez vino a Montevideo. Días después se supo que Antonini había estado al menos seis veces en Uruguay entre 2006 y 2007, la última vez horas antes de la llegada de Chávez a Montevideo el martes 7 de agosto.

Al iniciar su declaración ayer como testigo clave, Antonini dijo que cuando se generó el problema por la valija se reunió en un hotel de Buenos Aires con el vicepresidente de Pdvsa filial argentina, Diego Uzcátegui, quien le preguntó dónde estaban los otros US$ 4,2 millones. "El dinero había salido de Pdvsa, no era mío", declaró Antonini. "La noche del domingo (dos días después del decomiso) fui a ver a Diego Uzcátegui a su hotel. Le pregunté por qué había quedado yo metido en medio de esto, y me respondió: `¿Dónde está el resto del dinero?`. Yo le dije: ¿De qué me hablas? Y me dijo: `Había otra maleta con 4,2 millones`, relató.

El juicio es contra tres venezolanos y un uruguayo acusados de actuar como agentes extranjeros encubiertos para obligarlo a ocultar el origen y el destino de ese dinero.

De acuerdo con su testimonio, estando en Caracas fue invitado a viajar a Argentina por Claudio Uberti, ex funcionario argentino de control de autopistas.

Al llegar a Aeroparque en Buenos Aires una funcionaria de Aduana abrió una de las maletas que el empresario llevaba en sus manos y aparecieron los US$ 800.000. "El resto de las maletas ya las habían subido a autos que esperaban en el aeropuerto", contó Antonini.

De regresó a Miami tras el escándalo de la valija, Guido Antonini comenzó a recibir llamadas de empresarios venezolanos radicados en esta ciudad, socios suyos en varios negocios y vinculados al gobierno de Chávez. Querían asegurarse de que no revelara el origen y el destino del dinero.

Antonini denunció al FBI las presiones del gobierno venezolano. Así grabó encuentros con los empresarios venezolanos Franklin Durán y Carlos Kauffman, el abogado venezolano Moisés Miónica y el uruguayo Rodolfo Wanseele.

Contó que mientras revisaban el maletín metieron mano y él logró rescatar US$ 30.000 y no sabe cuánto Daniel Uzcátegui, hijo del vicepresidente de Pdvsa. Antonini confirmó además que el lunes 6 de agosto de 2007 asistió a una recepción que ofreció Kirchner a Chávez en la Casa Rosada, y que luego viajó a Montevideo donde, dijo, tiene amigos.