“Supercolisionador”
El deseo de los aproximadamente mil científicos e ingenieros que trabajan en el proyecto es comenzar a operar el colisionador a partir de 2023.
En Dubná, a unos 100 kilómetros al norte de Moscú (Rusia), se comienza a vislumbrar lo que será un enorme complejo científico que albergará el “supercolisionador” NICA, un gran proyecto con participación internacional con el que Rusia aspira a recrear los primeros momentos del Universo.
La construcción del NICA (Nuclotron based Ion Collider Facility) en el Instituto Conjunto de Investigación Nuclear (JINR) comenzó en 2013 y está previsto que las obras concluyan a finales del próximo año, explicó el científico Dmitri Driablov.
El deseo de los aproximadamente mil científicos e ingenieros que trabajan en el proyecto es comenzar a operar el colisionador a partir de 2023. El objetivo es estudiar la transición de la materia ordinaria al plasma quark-gluón, una “sopa” muy caliente y densa que existía justo unas pocas millonésimas de segundo después del Big Bang, hace 13.700 millones de años.
Para ello en Dubná se harán colisionar haces de iones de oro. El objetivo a largo plazo del JINR es que el NICA sirva no solo para “observar el origen del estado actual del Universo”, sino también para ofrecer soluciones prácticas en los campos del espacio y el tratamiento de cáncer.
El JINR, fue fundado en 1956 y cuenta actualmente con 5.000 empleados de países de Europa, Asia y América Latina.