La Nación (GDA)
Cuando llega el verano, las temperaturas se vuelven más cálidas y los días, más largos. Esto se dará en Estados Unidos en apenas unas semanas, cuando la primavera boreal llegue a su fin. Para el hemisferio norte, esta temporada inicia el 20 o 21 de junio, según el lugar, pero en el país norteamericano el verano comenzará exactamente el 21, cuando ocurra el solsticio.
La segunda estación boreal del año es una de las más esperadas, puesto que es la época de vacaciones escolares, por lo que se aprovecha el período para pasear y descansar. El calor aumenta, pero también las fiestas en la pileta y las escapadas a la playa, que se vuelven refugio para el calor, según la región en la que se resida.
¿Qué es el solsticio de verano?
Un solsticio es el resultado de la inclinación del eje norte-sur de la Tierra 23,4 grados hacia el sol. Este movimiento provoca que las diferentes regiones del planeta reciban cantidades diferentes de luz solar durante un año, cuando la Tierra completa su movimiento de traslación, tal como explica National Geographic.
En el solsticio de verano (boreal), el hemisferio norte recibe más luz solar que en cualquier otra época del año. Sin embargo, eso no significa que las temperaturas se elevarán de inmediato o que el primer día será el más caluroso, ya que los océanos y la atmósfera de la Tierra actúan como disipadores.
Aunque el planeta absorbe mucha luz, tendrán que pasar varias semanas para que libere el calor, por eso los días más calurosos se presentan en julio o agosto. Robert Howell, astrónomo de la Universidad de Wyoming, explicó este fenómeno con un ejemplo cotidiano: “Si enciendes un horno, tarda mucho en calentarse, y cuando lo apagas, toma un tiempo para que se enfríe. Lo mismo pasa con la Tierra”.
Se suele creer que la Tierra está más cerca del sol en este período por el calor que se presenta, pero esto es falso. Mark Hammergren, astrónomo del Adler Planetarium, en Chicago, indicó que la inclinación del planeta tiene más influencia en las estaciones que la distancia de la Tierra al sol: “Durante el verano del hemisferio norte, en realidad estamos más lejos del astro luminoso”.
Recomendaciones de los médicos para el verano
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) emitieron seis recomendaciones para esta próxima estación:
- Realizar al menos 150 minutos de actividad física cada semana para dormir mejor y reducir la ansiedad.
- Usar protector solar con al menos SPF15 y sombreros de ala ancha en caso de estar en lugares sin sombra. También se recomienda utilizar repelente de insectos, camisas de manga larga y pantalones largos para evitar picaduras de mosquitos y garrapatas.
- Mantenerse fresco en calor extremo, sobre todo las personas que tienen enfermedades crónicas, puesto que las altas temperaturas podrían ser “especialmente peligrosas” para ellas.
- Comer alimentos sanos. Las frutas y verduras hacen que cualquier comida de verano sea saludable, aseguran.
- Elegir bien las bebidas. Se recomienda ingerir agua natural en lugar de líquidos con altos niveles de azúcar o alcohol.