Un film sobre la hambruna de 1942 se perfila como la apuesta más fuerte de la cinematografía china de la temporada. Titulado justamente "1942", acaba de llegar a las pantallas de la República Popular China.
El tema del hambre en el campo es muy sensible en China, donde el catastrófico "Gran Salto Adelante" de Mao dejó decenas de millones de muertos veinte años después de ocurridos los hechos, en tiempos de la Segunda Guerra Mundial, narrados en esta película dirigida por Feng Xiaogang.
Producido a un costo de un presupuesto de 210 millones de yuanes (33,8 millones de dólares, 26 millones de euros), el film cuenta con todos los apoyos oficiales imaginables, y su elenco está encabezado por dos de las mayores estrellas nacionales de China, Zhang Guoli y Chen Daoming. En papeles importantes figuran también dos actores de Hollywood, Adrien Brody y Tim Robbins. El papel de Brody, en particular, es muy central: encarna al famoso periodista norteamericano Theodore White, que informó al mundo de los horrores que estaban ocurriendo en ese momento en la China ocupada por los japoneses.
Hasta ahora, los propios chinos parecían haber olvidado la tragedia: una hambruna que mató a tres millones de personas en la provincia central de Henan. Los elementos naturales no lo explican todo.
Henan estaba cortada por la línea de frente que separaba al Ejército imperial nipón de las fuerzas nacionalistas de Chiang Kai-shek. La región guardaba asimismo los estigmas de la gigantesca inundación provocada cuatro años antes por la rotura voluntaria de los diques del Río Amarillo con el fin de impedir el avance japonés.
La sequía, una invasión de langostas y la incuria de los funcionarios hicieron el resto: en 1942, decenas de millones de campesinos pasaron hambre, debieron huir y hasta prostituyeron a sus hijos por un poco de arroz. En sus reportes desde China, el periodista White informó entonces, incluso, escenas de canibalismo.
La publicidad oficial china ha presentado la película como una historia sobre "uno de los momentos más sombríos de la historia reciente china". Observadores extranjeros más críticos han señalado que ni la prensa china ni ningún miembro del equipo de la película se ha atrevido a hacer un paralelismo entre el hambre de 1942 y la del Gran Salto Adelante, que fue al menos diez veces más mortífero (cuarenta millones de muertos, según investigación del periodista Yang Jisheng dada a conocer en su libro Lápidas, debidamente prohibido en China.
"Los occidentales solo conocen el hambre de 1962, no conocen la hambruna de 1942, que es necesario mostrar para que sirva de lección de historia", ha justificado el director Feng Xiaogang. Interrogado sobre las posibilidades de hacer una película equivalente sobre la hambruna maoísta, el hombre prefirió cambiar de tema.
(BASADO EN AGENCIAS)