Una moda es mejor que nada

MATÍAS CASTRO

Hace pocos días el portal argentino de Internet, Infobae, publicaba una nota que se titulaba: "Una nueva moda de los famosos". A continuación el autor se despachaba hablando sobre los hijos mellizos de famosos. Tenía bastante razón al agrupar los diversos nacimientos que han ocurrido recientemente y que a cierta altura parecen cosa premeditada. Por supuesto que no lo son, y hablar de una moda es excesivo, pero parece como si lo hicieran a propósito.

Rebecca Romijn, una hermosa actriz que apareció en las películas de X-Men y en Femme fatale entre otras, será madre de mellizos. Patrick Dempsey, el nuevo galancito de Hollywood, tuvo hijos mellizos el año pasado. Por esas fechas la actriz Marcia Cross, de Amas de casa desesperadas, también tuvo mellizas. Dennis Quaid, por otra parte, también tuvo sus mellizos. Y no hay que olvidares de los mellizos más importantes del mundo: los de Brad Pitt y Angelina Jolie. Y también los de Jennifer Lopez y Marc Anthony y, por supuesto, Ricky Martin.

Vista así la enumeración y sumando varios nombres más, parece como si fuera un antojo. Ya alguna revista podrá publicar un artículo que se llame "Mellizos: ¿moda, tendencia o casualidad?". Y con eso todo el mundo podrá discutir a gusto.

Lo cierto es lo que cualquier ser humano sabe: la casualidad es la que manda en estos casos. La excepción puede aparecer si se prueba que algún superfamoso se practicó inseminación artificial y logró así sus mellizos. De todas maneras esto queda en el campo de la imaginación.

Para la nota en el sitio web argentino es una moda. Es más divertido llamarla así que decir que, simplemente se trata de una casualidad. Al menos se puede sacar algo más interesante de un tema que, por más que brille, es trivial.