Un homenaje para la memoria propia

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Pepe Vázquez recuerda los mandamientos con que Los Lobizones encaraban el trabajo de "Telecataplúm". Las directivas apuntaban a ser capaces de crear un humor propio y no recurrir a público aplaudiendo para contagiar a la platea.

Hicieron historia dentro de la historia del canal que el jueves de noche festejó sus 50 años. Apelaron a un conjunto de comediantes muy talentosos, confiaron en las propias virtudes y supieron leer el espíritu con que la sociedad de entonces podía recibir el humor. Se transformaron en parte esencial y ejemplo de cómo construir una fuerza propia que identificó al canal y su público, y hasta generó hijos como Plop!

Inevitablemente fueron referencia en la fiesta del cincuentenario de Teledoce. Para ella se recuperaron fragmentos memorables del programa, como el partido de fútbol entre el equipo de Cristóbal Colón y el de los charrúas, originalmente relatado por Carlos Solé, donde el primero compró con espejitos la traición de un indígena para poder conquistar un gol. O las múltiples formas que tenía Emilio Vidal para cantar Malena y sin cambiar nada, a pura actuación, pasar de versiones festivas a otras sarcásticas.

El testimonial realizado expresamente para la celebración, sorprendió al mostrar los alcances que un programa de televisión puede tener. En una secuencia se puede ver al general Líber Seregni comentando que cuando a los presos les dieron la posibilidad de ver un programa en la pantalla chica, no dudaron en elegir las Noticias cantadas. Era la manera de divertirse y poder mirar más allá de lo que la dictadura solía permitir.

Si el canal en sus 50 años puede recordar que en su patrimonio está el legado de estos pioneros del humor, también lo está otro adelantado, Rubén Castillo, que con Discodromo show abrió una ventana capital para que la música uruguaya se proyectara con cierta masividad. Y lo que el interminable Cacho de la Cruz ha hecho en el rubro entretenimiento.

Un libro de lujo que se llevaron los invitados a la fiesta, se encarga de recordar los programas que marcaron el cincuentenario del canal, una forma de recuperar la memoria colectiva, trazada desde la ficción, la realidad periodística y hasta de la menospreciada publicidad. El jueves de noche volvió a aparecer con unos cuantos años más Constanza, la nenita que a comienzos de los años `80 conmovió con un mensaje navideño.

GALAS. La tradición del 12 ha sido la de festejar en su propia casa, para lo cual transforma dos de sus estudios. A los cincuenta años se mantuvo el ritual hogareño, aunque esta vez se quiso hacer una presentación formal renovada. Alfonso Cardozo fue el encargado de hablar en nombre del directorio, reflexionando sobre algunos principios en los cuales fue tejiéndose la empresa. Pero su palabra no llegó sola sino que apareció acompañada por las de seis jóvenes en nombre de las nuevas generaciones que están trabajando en el canal.

El simbólico gesto acerca de continuidades fue seguido con otro reconocimiento a las raíces, porque se decidió darle el nombre de Los Lobizones (Jorge y Daniel Scheck) al estudio D del canal, al lado del que hoy recuerda al ingeniero Horacio Scheck, quien durante años condujo la empresa.

Esa mirada hacia atrás que el canal inexorablemente realizó al llegar a los 50 años, hizo que la historia también estuviera paseándose entre los invitados. Ruben Rada, Cacho de la Cruz, Pepe Vázquez, Roberto Jones, Raúl Medina, Julio Alonso y Homero Rodríguez Tabeira se paseaban al lado de colegas más jóvenes. No se trata de cortes generacionales sino de combinaciones que están evidenciadas en la programación que se adelantó para el 2012.

Mientras Victoria Rodríguez seguirá con Esta boca es mía, Bonino-Da Silveira-Fabregat con Sonríe te estamos grabando, Guillermo Lockhart con Voces anónimas, Juanchi Hounie con Minuto para ganar y Kairo Herrera con Cámara testigo, se anunció varios regresos. Uno es el de Rada que junto a Rodríguez evocarán las agendas musicales de los últimos cincuenta años. Otro vendrá con Cacho de la Cruz con una producción que si bien va dirigida al entretenimiento, Canta si puedes, no tiene nada que ver con las últimas propuestas del también músico.

Rodeando las producciones propias, desde Argentina estará llegando la nueva temporada de ShowMatch y su satélite Soñando por cantar, mientras que desde Brasil lo harán cuatro telenovelas (El astro, Fina estampa, Cuento encantado e Insensato corazón). Por eso, dos grandes actores brasileños, Regina Duarte y Lima Duarte, fueron invitados de lujo.

Es una ficción argentina que se las trae. Óscar Martínez y Soledad Silveyra forman una pareja que en los `80 fueron referentes en el mundo de la pornografía, pero treinta años más tarde viven entre el fracaso, la frustración y la decadencia. Los acompañan Leticia Brédice y Favio Posca.

Un renovado Cacho de la Cruz será el encargado de conducir un programa de entretenimientos que se las trae: los participantes deberán cantar en las condiciones que la producción les impone. Entre víboras o ratones, girando en una ruleta o enchastrados de arriba a abajo.

La argentina Esther Feldman (guionista de LaLola) escribió una serie de historias sobre violencia doméstica. Mireya Pascual, Diego Delgrossi, Augusto Mazzarelli y Gonzalo Valenzuela son algunos de los actores que aparecen en cada uno de los elencos de lujo.

Ruben Rada y Victoria Rodríguez serán los encargados de conducir el programa destinado a rescatar la música que ha servido para marcar las últimas cinco décadas. Imágenes y canciones brotarán desde los ya lejanos años `60.