AGENCIAS Y EL PAÍS
"Sorprendida", fue la palabra que le salió de la boca a la escritora rumana Herta Müller al enterarse que era la flamante Premio Nobel de Literatura. Y si bien su reacción no fue muy original, sus novelas sí lo son, y eso es lo que importa.
Miembro de la minoría étnica alemana en Rumania que fue perseguida por sus caracterizaciones críticas de la vida tras la Cortina de Hierro, la escritora ganó ayer el Premio Nobel de Literatura, en lo que se consideró un aval al vigésimo aniversario del desplome del comunismo.
Müller fue elegida como galardonada por una obra que "con la concentración de la poesía y la franqueza de la prosa, pinta el panorama de los desposeídos", dijo la Academia Sueca.
Se anticipaba que la decisión, que entre otros postergó una vez más al novelista peruano Mario Vargas Llosa y a otros candidatos estadounidenses, alimentará la controversia de que los escritores europeos son los que acaparan los premios.
"Si eres europeo es más fácil identificarte con la literatura europea``, dijo Peter Englund, secretario permanente de la Academia Sueca. "Es el resultado del prejuicio psicológico del que tratamos de estar conscientes. No es el resultado de ninguna agenda".
personalidad. Aunque ya reconocida en los ambientes literarios, con traducciones a varias lenguas (incluyendo el español), Müller dista de ser una figura mediática.
La escritora, de 56 años de edad, hizo su debut literario en 1982 con una colección de relatos breves titulada En tierras bajas (Niederungen), sobre la vida ardua en un pequeño pueblo rumano de habla alemana.
El manuscrito de ese libro reposó cuatro años en la editorial antes de ser publicado en 1982 con recortes impuestos por la censura rumana, pero la versión íntegra apareció dos años después en Alemania y las autoridades rumanas le prohibieron publicarlo en su país. Esa obra le valió el premio alemán Aspekte al mejor debut en lengua alemana del año. Se trata de narraciones breves sobre la vida de un pueblo venido a menos y perdido en Rumania según la perspectiva de una niña. Asoman en él los temas de la represión y la incomunicación en la esfera familiar y social.
A ese libro le siguió Tango opresivo, que también se le prohibió publicar dentro de Rumania por sus críticas al régimen del dictador Nicolae Ceausescu y su temida policía secreta, la Securitate.
"La prensa nacional rumana fue muy crítica de estas obras mientras que, fuera de Rumania, la prensa alemana la acogió de manera muy positiva``, dijo la Academia.
Müller, cuyo padre se desempeñó en las fuerzas de élite nazis durante la Segunda Guerra Mundial, es la tercera europea consecutiva que gana el premio y la décima de Alemania, para sumarse a Günter Grass (1999) y Heinrich Böll (1972).
"Creo que lo que escribe tiene una fuerza increíble, tiene un estilo sumamente singular", opinó Englund. "Uno lee media página y ya sabe que se trata de Herta Müller``.
"A la vez tiene algo que contar, en parte de sus propios antecedentes como una disidente perseguida en Rumania y también como una extraña en su propio país, extraña al régimen político, extraña al lenguaje mayoritario y extraña a su propia familia``, agregó.
La novelista emigró a Alemania con su marido en 1987, dos años antes de que Ceausescu fuera derrocado en momentos en que el comunismo se desplomaba en toda Europa oriental.
"Es una escritora muy sincera que escribió sobre lo que le ocurrió y esto es algo que debe haber impresionado a los jurados``, comentó el actor rumano Ion Caramitru, un anticomunista que llegó encaramado a un tanque hasta la emisora de televisión en Bucarest durante la revuelta de 1989 y que ahora dirige el teatro nacional rumano. "Este premio es el reconocimiento internacional de la opresión en Rumania y Europa del este``, reflexionó.
Emil Hurezeanu, un periodista rumano que conoció bien a Müller, asegura que la autora se vio obligada a irse de Rumania debido al hostigamiento de la Securitate, que se cree llegó a tener 700.000 informantes.
"Trabajaba como traductora en una modesta fábrica cerca de Timisoara. Era perseguida y fue despedida de su empleo como solían hacer. Los manuscritos de uno de sus libros fueron llevados a Alemania por un diplomático alemán", relató. "Sus libros e idioma son inspirados por Rumania: tiene una prosa muy intensa, y escribe en un estilo animado, poético, corrosivo``, agregó.
La mayoría de su obra está en alemán, pero algunos de sus libros han sido traducidos al inglés, francés y español, incluyendo En tierras bajas, El hombre es un gran faisán en el mundo (de 1992), La piel del zorro (de 1996) y La bestia del corazón (de 1997). Casualmente, su novela más reciente, Atemschaukel, es candidata al Premio del Libro Alemán del Año, que será anunciado el lunes próximo.
"La autora está muy complacida, como también nosotros``, afirmó Leonie Obalski, vocera de la editora Hansa Verlag, que publica sus trabajos.
Balance. Müller es la duodécima mujer que gana el Nobel de Literatura, habiendo sido la chilena Gabriela Mistral la primera en ganarlo para Hispanoamérica. Y la más reciente antes de Müller fue la británica Doris Lessing, en 2007.
Este es el primer año que cuatro mujeres ganan premios Nobel, puesto que Müller está acompañada por las investigadoras Elizabeth Blacburn y Carol Graider, que compartieron el Nobel de Medicina y la israelí Ada Yonath, que se hizo con el Nobel de Química.
El premio incluye además del reconocimiento, 10 millones de coronas suecas (1.4 millón de dólares), y será entregado el 10 de diciembre en la capital sueca. Ya se anunciaron los premios de Medicina, Física, Química y Literatura, y hoy se anunciará el Nobel de la Paz, en Oslo, Noruega. Para el lunes se espera el anuncio del Nobel de Economía.
Una notable escritora poco leída en Uruguay
La escritora Herta Müller es originaria de Rumania pero perteneciente a la minoría germanohablante de ese país. En sus libros describe la vida cotidiana en una "dictadura petrificada", en palabras de la Academia Sueca.
Autora de novelas, cuentos, ensayos y poesía, la escritora goza de gran notoriedad entre los escritores de lengua alemana y la élite intelectual de su país natal.
La calidad de su escritura y la audacia de sus metáforas le valieron antes varios premios literarios, entre ellos el Kleist, uno de los mayores galardones alemanes, en 1994, y el Premio Würth de literatura europea en 2006.
En español hay al menos cuatro títulos de ella que han sido traducidos, en ediciones de Siruela y Mondadori. Ellos son En tierras bajas, El hombre es un gran faisán en el mundo, La piel del zorro y La bestia del corazón.
En Uruguay los dos primeros estuvieron a la venta, aunque sin mucha demanda. Ayer, al conocerse la noticia, la distribuidora Gussi despachó los pocos ejemplares que le quedaban. Gussi piensa encargar más, aunque la demora podría ser de al menos un mes. Los ejemplares de En tierras bajas y El hombre es un... valen en las librerías montevideanas (si se encuentran) algo más de $ 400. Pero los de la nueva partida saldrán seguramente mucho más. Mondadori también distribuye la obra de Müller, aunque hasta ahora no la trajo a Uruguay. Ahora realiza gestiones en Buenos Aires para ver si puede traerla.
Perfil
Nombre: Herta Müller
Nació: Rumania, 1953
Edad: 56 años
Otros datos: Disidente, fue perseguida en su país natal.
Literatura de fronteras
Su madre fue deportada a un campo de trabajo de la Unión Soviética después de la Segunda Guerra, y su padre fue miembro de la SS. De esa mezcla de experiencias surgió esta escritora, que entre 1973 y 1976 estudió alemán y literatura rumana en la Universidad de Timisoara. Al terminar los estudios formó parte de una asociación de escritores germanohablantes disidentes. Acosada por el régimen, en 1987 se exilió en Alemania del Oeste, y actualmente reside en Berlín. Poco conocida del gran público hasta principios de 2000, Müller fue descubierta por la crítica alemana en 1984, al publicarse "En tierras bajas". En sus obras describe la vida cotidiana en un Estado totalitario, pintando el mundo de los disidentes rumanos.
Extranjera en su propia tierra: las raíces alemanas de la escritora
"En el pueblo en el que crecí, no había rumanos. Aprendí el rumano en el colegio, como si fuera una lengua extranjera", explica la escritora.
Nacida el 17 de agosto de 1953 en Nitchidorf, cerca de Timisoara, en una región de tradición germana, Banat (oeste y suroeste de Rumania), Müller es nieta de un agricultor y comerciante acomodado que perdió sus propiedades con el comunismo. Sus obras se inspiran en su experiencia política, aunque su estilo ha sido vinculado al carácter ensoñador de Juan Rulfo. En su última novela, "Atemschaukel", evoca el exilio de los alemanes de Rumania hacia la URSS en 1945. A ella le gusta recortar palabras en los periódicos y revistas: las clasifica para después utilizarlas o dejarlas envejecer en un rincón de su escritorio: ve en ellas una metáfora de la vida.