Primer título del año de El Galpón: "El instrumento"

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El sábado El Galpón estrena en su salita Cero El Instrumento, un drama cotidiano escrito y dirigido por Sebastián Barrios. Un asesinato cruza la realidad de dos familias, desencadenando contradicciones y furias, mientras se exponen sensiblemente las zonas más oscuras del ser humano y del sistema.

Interpretada por Alicia Alfonso, Cristian Amacoria, Lucía David de Lima, Silvia García, Nadina González Miranda, Gisella Marsiglia y Elizabeth Vignoli, la obra irá los sábados a las 21:30 horas y los domingos a las 20:00 horas. Las localidades valen $ 200 y se venden en la propia sala (18 de Julio 1618, tel. 2408 3366).

El texto había sido seleccionado en 2009 por El Galpón para participar del ciclo de teatro leído dedicado a autores nacionales, en el que su autor presentó una versión escénica de cierta elaboración. El éxito de aquella experiencia llevó a que el texto fuera incorporado a la programación de la compañía.

"El instrumento es un texto con claro contenido social, lo que significaba continuar trabajando sobre la realidad de sectores de nuestro país más vulnerados, trabajo que comenzó en 2009 con Menarquias (espectáculo estrenado en el teatro de la Candela), y que continuó en 2010 con Migajas, estrenada en la Sala Cero de El Galpón como espectáculo invitado. El desafío tenía que ver con recoger de alguna manera mi experiencia como educador, luego como docente de teatro en el área comunitaria (trabajo que me permitió estar muy cerca de la realidad de poblaciones en contexto crítico), y con todo lo que ello conlleva. Poder dialogar con esa realidad, con toda la información que digerimos día a día por los medios de comunicación, y dejarle al espectador más que respuestas, algunas preguntas, algunas pistas, de cómo construir algo frente a este panorama tan desolador en el que estamos", explica Barrios.

"Creo que se debe trabajar para que el adolescente pueda responsabilizarse por sus actos, y esto es posible si se garantizan sus derechos, esto tiene que ver con mantenerlo socialmente incluido: por supuesto que esto no es nada sencillo porque entran en juego otros sistemas que también el adolescente integra, como son la familia, nosotros como sociedad, y obviamente el Estado", agrega el autor.

De este modo, El instrumento toma como eje la familia, para sumergir al espectador en la realidad de esa gente capturada por un sistema, y busca exponer lo complejo de las relaciones humanas, los conflictos y los modelos que se repiten de generación en generación.