Polémica por una pulsera

Los hermanos Troy y Josh Rodarmel (yanquis ellos) crearon una pulsera energética, que promovió una gran polémica entre los inventores y varios científicos. Por un lado, el dúo asegura que la "Power Balance" tiene poderes que brindan equilibrio, fuerza y flexibilidad: y por otro lado, para el presidente de la Asociación Argentina de Medicina del Deporte -expresado tal como voy a transcribirlo, dijo a un periodista de "Clarín"- se está "frente a una estafa intelectual basada en la ignorancia de la gente. Se las regalan a los famosos, y la gente las usa por imitación".

No bien se conoció el "descubrimiento" de la "Power Balance", entró a desplegarse un enorme operativo de "marketing", planificado sobre la sucesiva aparición de personajes de distintos sectores que expresaban su conformidad con la tal pulserita, y la exhibían en todos lados entre sonrisas y satisfacción.

Uno de los primeros en hacerlo, fue Cristiano Ronaldo, el astro del Real Madrid, que debe haberla estrenado luego del Mundial de Sudáfrica donde, pese a su fama, no agarró una pelota jugando por su país, Portugal, sorprendiendo a crítica y público por su falta de energía. Un empresario que es protagonista en el escenario del campo argentino -don Hugo Biolcatti- figuraba entre los usuarios iniciales, y se dice... (cuesta creerlo) que habría pedido a los Rodarmel un modelo adaptable a las vacas, a fin de aumentar la producción láctea. Un sindicalista de renombre (para bien o para mal, pero de renombre) como Luis Barrionuevo, se jactaba de la nueva energía que lo dinamiza en sus tareas políticas... Y como ellos, otros famosos acompañaron a los inventores, que lanzaron el artículo repartiendo 50.000 pulseras en un campeonato de surf, se afirmaron en la "tablita", y superaron las furiosas olas de las denuncias en contra de semejante "mentira industrial"... Pero, la verdad es que, a partir del momento en que los delirantes de "Gran hermano" las mostraron en la TV, la facturación de los creadores cerró el año 2010 con un total aproximado a los 35 millones de dólares. En España los trataron de embaucadores, y multaron su publicidad engañosa con 15.000 euros: pero a ellos poco les inquietó, porque contaron con la adhesión de una Ministra de Salud Pública -Leire Pajin- que declaró a la prensa que la usa porque se la regalaron y le gusta, y poco le importan los comentarios desfavorables. No hay duda de que los Rodarmel Brothers han encontrado en ella, un argumento para afianzar la venta de la pulsera... en otras palabras, parecen disponer de una excelente muñeca, para imponerse en la plaza comercial española.

Esperemos, para ver quién gana finalmente la pulseada.