Murió Cacho Fontana, histórico comunicador argentino, dos días después que su ex esposa

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Hombre de la radio argentina cuya fama se hizo sentir en Uruguay,  Cacho Fontana falleció a los 90 años. Los últimos meses había sufrido una secuencia de quebrantos de salud, incluyendo haber pasado por el covid. El domingo había fallecido su exesposa y madre de dos de sus hijas, Liliana Caldini.

Se va, literalmente, toda una época del mundo del espectáculo argentino. Sus programas radiales y televisivos lo hicieron una estrella y una presencia habitual en las revistas del corazón de las décadas de 1960 y 1970. Sus parejas de perfil alto (además de Caldini estuvo casado con la actriz Beba Bidart y se le adjudicaron varios romances de perfil alto) y algunos escándalos acompañaron un talento que lo convirtió en una figura clave en los medios argentinos.

Infobae, al dar la noticia de su muerte, ejemplificaba la trascendencia de Fontana en el imaginario argentino. "Si se le pide a un millón de argentinos, mayores de 40 años, que cierren sus ojos y escuchen un 'con seguridad' (uno de sus latiguillos), dirán sin que nadie se los diga: es la voz de Cacho Fontana".

De aspecto, tonada y figuras bien porteños, Jorge "Cacho" Fontana había nacido en Buenos Aires, dónde más, en abril de 1932 como Norberto Palese. Sus primeros trabajos fueron como maestro de ceremonias de lugares nocturnos.

Pasó por todas las radios argentinas importantes aunque se lo asocia más con Rivadavia, la emisora para la que condujo Fontana Show, uno de sus grandes éxitos y que también trasladaría a la televisión. Integró el equipo que cubrió para la radio, el mundial de fútbol de 1966 junto a José María Muñoz y Enzo Ardigó.

Ese "con seguridad", lo creó para Odol pregunta, un programa de preguntas y respuestas que aún es uno de los grandes hitos de la televisión argentina . Junto a Pinky, su gran amiga, inauguró la televisión color en la vecina orilla. Con ella también se encargaron de la telemaratón televisiva cuando la guerra de las Malvinas, en 1982.

Algunos escándalos mediáticos y problemas de pareja que llegaron a la justicia marcaron el declive de su carrera, después de haber dominado los medios durante más de 30 años.

"Para muchos todavía resulta inexplicable cómo una de las figuras más importantes de la historia de la radio y la televisión en la Argentina, dueño de una voz excepcional de la que se valió para imponer un estilo que hasta hoy sigue imitándose, cayó en un camino autodestructivo que casi termina por completo con la fama, el prestigio y el dinero que obtuvo a raudales por méritos propios", dijo en su obituario para La Nación, Marcelo Stiletano. "Después de hacer por años lo que quiso y tener a su alcance todo el disfrute material imaginable, Fontana pasó sus últimos años en una residencia para adultos mayores y reconoció sin vueltas en más de una oportunidad la estrechez económica a la que se enfrentaba mientras el trabajo se hacía cada vez más escaso".

Un final triste para una figura que dio tantos buenos momentos a más de una generación de argentinos.
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