MIGUEL CARBAJAL

LAS COLUMNAS

Según rumores, en China se habría creado un gigantesco operativo de falsificación para cambiar la fecha de nacimiento de las concursantes a gimnasia olímpica. Como no pueden ser menores de 14 años y como a medida que se es más joven la musculatura es más elástica, había que inventar la fórmula de hacer parecer mayores las que realmente eran menores. Al revés de lo que sucede en el mundo. China negó esas acusaciones pero, si miente a nivel de derechos humanos y ejerce un sistema político autoritario y censor, es lógico que se desconfíe de ella. Mejor dicho: es natural que no se le crea. Varias medallas de oro fueron acopiadas por esas especies de muñecas disfrazadamente asiáticas, con alturas y pesos muy por debajo del promedio normal.

¿Son todas enanas? Los países son capaces de volverse poco éticos con tal de conseguir un premio internacional. Hugo Chávez es puro flanco. Y tan poco creíble como un chino. Pero no fue él quien ideó convertir a Venezuela en una usina de bellezas. La historia se armó sola. Venezuela obtuvo un certamen de belleza (Miss no sé cuanto), luego otro y otro, hasta llegar al último. ¿Qué pasa en Venezuela que todas sus mujeres son exóticas, esbeltas, con una dentadura de oreja a oreja? Las preparan al nacer. Las someten a tratamientos médicos, a jornadas quirúrgicas, a cursos interminables de modelaje, a borrar con el bisturí o el comportamiento cualquier defecto que pueda rebajar un puntaje.

En Brasil se sostiene que la mezcla de alemanes con portugueses y mulatas abastece las garotas de Ipanema, cimbreantes como palmeras. ¿Y en Venezuela cómo funciona la combinación? Fue un dato que olvidó averiguar la neo diputada Adriana Peña.

Y hablando de fórmulas de bellezas a nivel local, ¿por qué razón las Misses de antes eran más provocativas que las de ahora? La primera Miss Uruguay oficial resultó ser una morocha de Soriano, de buen porte pero algo excedida. No viajó a Estados Unidos. Se supone que un novio celoso se cruzó en el camino. En su lugar fue Gladys Rubio Fajardo. Viajó de casualidad y sin embargo resultó ser la mejor clasificada del circuito nacional.

Aunque también hubo otra después. Era graciosa, tenía soltura y se acercaba a los cánones vigentes. En una ocasión resolvieron jugar la carta nacional. Eligieron a Titina Aguirre, una petisa morocha capaz de causar infartos masivos. Hubiera necesitado medio metro más para tener éxito. En otra de las oportunidades eligieron a Ana Moreno, una mujer bonita pero ya formada que alguien había vinculado sentimentalmente a Cantinflas. Casi la jubilaron. Una de las Misses fue Alicia Ibáñez. Algo debió tener.

En una "Look" de la época aparecía retratada en el rodaje de Picnic cuando proyectaban hacer de Kim Novak una megaestrella. No figuró luego en los títulos ni alcanzó cartel internacional. No hizo nada pero anduvo en los umbrales de Hollywood.