Esta tarde a las 19 horas se inaugura oficialmente el "Teatro de La Candela, Punta Carretas". A esa denominación debe adjuntarse otra: esa flamante sala de 108 plateas que esta noche se abrirá al público, lleva el nombre de "Andrés Castillo", rótulo muy justo no sólo porque Castillo se desempeña desde hace décadas como presidente del Teatro de La Candela, sino porque ha sido durante cincuenta años uno de los veteranos heroicos del movimiento de teatros independientes, como actor, dramaturgo y director pero además como dirigente gremial: Castillo fue a lo largo de mucho tiempo presidente de la Sociedad Uruguaya de Actores, cargo desde el cual resultó algo más que una cabeza visible. Fue un indomable defensor de los fueros escénicos y un combatiente de la causa (tantas veces castigada) del teatro nacional. Actualmente figura asimismo como vicepresidente del Instituto Internacional del Teatro y miembro de la Comisión del Fondo Nacional de Teatro. Nada menos.
El nuevo recinto está instalado en el subsuelo del pabellón frontal del Shopping Punta Carretas. Ese edificio, que forma la esquina de Ellauri y García Cortinas, había sido construído para vivienda del administrador de la cárcel y es actualmente Patrimonio Cultural de la Ciudad. En el subsuelo de muros de piedra, que han sido dejados a la vista, se desarrolla ahora la sala teatral con su vestíbulo, camarines, baños y boletería, al cabo de los trabajos que estuvieron dirigidos por el arquitecto Joaquín Molas. La obra, que resulta por cierto alentadora para el circuito escénico montevideano, es una pequeña proeza que debe atribuirse a la colaboración de empresas públicas y privadas, así como "a los cientos de horas de trabajo de los integrantes del elenco de La Candela".
RECUPERACION. Inaugurar un nuevo teatro parece —a los ojos de veteranos observadores de este medio— resucitar las viejas épocas del movimiento independiente, cuando las salitas brotaban como hongos por Montevideo. Aquella fue la etapa de fines de los 40 y comienzos de los 50, cuando el primer Galpón, el primer Club de Teatro, La Máscara, el Circular, Taller de Teatro, El Tinglado o Teatro del Pueblo iban sumando empeños para construir una red de actividades que pocos años después mostró su impulso y su poderosa corriente de público.
En este caso, además, la aparición del subterráneo espacio teatral en Punta Carretas sustituye al desaparecido teatro que La Candela mantuvo desde 1981 (y durante dos décadas) en la calle 21 de Setiembre casi Coronel Mora, a los fondos de una casa, en cuyo escenario operó hasta el desalojo de diciembre de 2000. Desde entonces, La Candela ha estado en busca de nueva sede y ahora la obtiene mediante el convenio que ha firmado con la Intendencia Municipal de Montevideo y con la Federación Uruguaya de Teatros Independientes, en iniciativa respaldada por Gonzalo Carámbula, director del Departamento de Cultura de la comuna.
EN PROGRAMA. Conviene que los interesados conozcan la programación que la nueva sala desarrollará en adelante: el viernes a las 21.30 irá Inespectáculo olvidable, por el grupo Toccata y Fuga que dirige Luis Chiaramello, espectáculo que combina música buen humor. El sábado a las 15.30 se ofrecerá Aladino de Daniel Romano, pieza para niños que dirige Mriam Campos que se repetirá los domingos a la misma hora. A las 21.30 podrá verse Mujeres de ojos grandes sobre textos de Angeles Mastretta, una prestigiosa escritora que ha sido llevada al teatro y al cine en varias oportunidades, con puesta en escena de Ernesto Clavijo, que también irá los domingos a las 19 horas. La pieza relata los encuentros de dos hermanas de temperamentos muy diferentes, separadas cuando el padre echa de su casa a una de ellas.
Por suerte, la aparición de La Candela no es un hecho aislado. Se sabe que en el complejo de salas cinematográficas del Montevideo Shopping Center —conocido como Moviecenter— se abrirá en primavera un teatro de 670 localidades, dividido en platea y tertulia. También esa sala, de mayores dimensiones, se incorporará de inmediato a las actividades con presencia de elencos nacionales y extranjeros. Cabe formular el correspondiente reconocimiento no sólo al espíritu batallador de la gente del movimiento independiente, sino también al aporte de empresarios particulares como en el caso de Moviecenter, resueltos a poner su futura sala al servicio de los trajines escénicos de una ciudad cuyos teatreros son infatigables. El teléfono de La Candela es el 712.3227.