El regreso de Emil Montgomery a las bateas de las disquerías se produce con Nómada, que acaba de salir a la venta en Uruguay. "Es algo diferente a lo que venía haciendo hasta el momento, como que me corrí del new age para incursionar en algo más electrónico y, a la vez, más orgánico", dice el músico. En realidad, el cambio fue tan grande que sentí que me reinventé, no solo desde lo estrictamente artístico sino también desde la forma de grabar y la relación establecida con la tecnología", agrega.

Buena parte de la inspiración para Nómada surgió en la ciudad de México, donde parte del disco fue grabado. "Cuando llegué a México, la energía urbana que sentí fue abrumadora y de esas impresiones iniciales salió el concepto del disco, la de un nómada que se pierde en la jungla urbana y se mueve en un mundo menos idílico que el que yo presentaba en discos anteriores".

Parte de Nómada también fue grabado en Uruguay, con músicos invitados como Martín Ibarburu, Federico Righi, y Gustavo Ogara, entre otros. Solo o acompañado, Montgomery pasa por estilos tan disímiles como el acid jazz, el drum&bass y el hip-hop, en un viaje que comenzó hace seis años en México.