Buceo invisible encabeza un show que celebra la música y la palabra

Sala Verdi. Hoy es la primera parada de una minigira por tres ciudades

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ALEJANDRA VOLPI

La banda uruguaya comparte escenario con los argentinos Guillermo Pesoa (ex Pequeña Orquesta Reincidentes) y Fer López Camelo en una gira que incluye Montevideo, Buenos Aires y La Plata. Hoy a las 21 horas es el debut en Sala Verdi.

El ciclo MVD, Bs. As., La Plata llega a su segunda edición con Buceo Invisible como representante local. La actividad es promocionada como "la celebración del encuentro, la música, los climas y la palabra", por las características de quienes comparten cartel en esta oportunidad.

La idea recuerda a Dos ciudades, una experiencia que se realizó en Montevideo en 2002 en el Planetario Municipal, en un intento por poner a dialogar bandas y solistas locales con propuestas bonaerenses. Más recientemente, el concepto se trasladó al ciclo Latinoamericana, de mayor alcance a nivel geográfico.

Este intercambio llega casi con bajo perfil, pero con un trío muy interesante. Buceo Invisible es un colectivo artístico llamado así por el barrio en el que se gestó, gracias a la inquietud de un grupo de músicos, poetas y artistas plásticos. Esa mezcla se traduce en escena, con un líder que acaba de lanzarse como solista.

Guillermo Pesoa es el ex tecladista de Pequeña Orquesta Reincidentes, compuso bandas sonoras para obras de teatro y películas, entre ellas la uruguaya Whisky. Es un rosarino atravesado por la melancolía, la misma que ostentaba Pequeña Orquesta Reincidentes hasta su disolución en 2008. Trae una propuesta intimista y despojada, pero de gran intensidad dramática en lo poético.

Por su parte, Fer López Camelo es la representante platense, una cantante y actriz que pasó por varios grupos de jazz, soul y bossa nova. Actualmente presenta su último disco, Suspendida. La artista tiene voz aniñada, aterciopelada, y al igual que las otras dos propuestas, busca la generación de climas suspendidos, minimalistas, crudos por momentos, pero lleno de detalles y recursos bien empleados.

"Creo que nos une el cuidado especial que le damos a las letras, a la palabra, a lo que decimos en las canciones. Hay una búsqueda común que, aunque nos nutramos de diversas influencias, deja en evidencia que hacemos música en el Río de la Plata. En nuestro caso, salvo la milonga, no incluimos ni murga ni candombe, pero el lugar geográfico se nota", dice Diego Presa, líder de Buceo Invisible y flamante solista. La banda está en un momento clave: prepara el festejo de sus quince años para octubre y tiene a su cantante experimentando en plena etapa de transición. Presa advierte que hubo un cambio en la forma de componer. "Cada vez más Buceo Invisible es un colectivo, antes se daba asiduamente que yo llevaba una canción y la trabajábamos entre todos. Ahora todo surge en grupo y de forma instantánea. Mientras pueda seguiré con los dos proyectos en forma paralela. Y es claro, que Buceo Invisible influyó mucho en la creación de mi propio disco. Tenía ganas de volver a mi espacio solo con la guitarra, con composiciones más desnudas y sin tener que negociarlas con nadie. Es más íntimo", explica el músico, que el próximo 20 de septiembre presentará su material en Bluzz Live.

Otro detalle que incrementa el atractivo del concierto de esta noche es el lugar: la Sala Verdi, donde habitualmente se montan espectáculos de teatro o de música de cámara. Un espacio con historia que sirve de contexto alternativo. "Es una sala preciosa que comenzó a abrirse recién ahora a la música popular", opina Presa.

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