Tiempos políticos

Año político, año de elecciones. La televisión no podía estar ajena a este hecho si bien, para las elecciones internas de junio, los canales privados prácticamente no dedicaron un espacio especial en su programación para informar a la población sobre el tema. La excepción fue "El Próximo Presidente", un breve ciclo de Canal 10 conducido por Gerardo Sotelo que presentó a los precandidatos presidenciales entrevistándolos.

Faltando un mes y medio para las elecciones nacionales de octubre fue nuevamente Canal 10 quien rompió el silencio político de la televisión privada y puso en pantallas "Dicho y Hecho" (martes, 22:30). Casi dos semanas después Canal 12 hacía lo propio estrenando "Código País" (domingos, 22 horas).

Pero si bien hoy en día la audiencia identifica a estas dos propuestas como programas políticos, ninguna de ellas nació con esa etiqueta, ambas pretenden ir más allá de la información política y posar su mirada en toda la realidad nacional.

"El canal nos dijo ‘miren que no estamos pensando en un programa político’. ‘Nosotros tampoco’, le respondimos", cuenta Gerardo Sotelo de la vez que, junto a Andrés Sena, productor general de "Dicho y Hecho", se sentaron con las autoridades de Canal 10 para hablarle de un proyecto que venían maquinando desde agosto del año pasado. Juntos habían hecho "La próxima puerta", periodístico del que incluso se anunció su regreso este año, pero ellos querían cubrir el año electoral con "algo más dinámico, más atractivo para la gente, entre otras cosas porque presumíamos que iba a pasar lo que en realidad pasó, que el año electoral se iba a hacer muy largo y muy tedioso y que valía la pena proponer un programa periodístico inclinado a lo político y donde lo político se tratara de una manera distinta a lo que habitualmente se hacía en los programas televisivos. Esto es siempre una pretensión que uno tiene, no quiere decir que te salga". Cuestiones de programación llevaron a que la concreción de la idea se fuera postergando.

También se postergó bastante la llevada a la práctica del proyecto de Aldo Silva en Canal 12. El periodista prefirió primero asentarse como conductor de la edición central de "Telemundo 12", para ya más tranquilo elaborar una propuesta que presentó recién en mayo de este año. "Mi proyecto era mucho más político y económico. Después, con las conversaciones con Eugenio Restano y la gerencia del canal, cambió un poco", explica sobre lo que desde el domingo 3 de octubre conocimos como "Código País".

FORMAR EQUIPOS. Los conductores estaban, faltaba formar los equipos tanto delante como detrás de cámaras. "Fuimos tirando nombres de gente que conocíamos, tratando de que representara con amplitud lo que es la sociedad uruguaya, no por representación política porque eso sería imposible. Queríamos que la gente se pudiera sentir representada con uno o con otro y que, además, fuera gente inteligente", relata Sotelo del proceso de selección que inició con Andrés Sena para llegar al staff definitivo: José "Pepe" Sena, Claudio Romanoff, Erika Hoffmann y Casilda Echevarría. "Por casualidad quedaron tres periodistas, porque podían no haberlo sido. Eso ayudó a que el programa tuviera un perfil más de información", agrega al tiempo que acota que, salvo José Sena, que funciona como cronista de lo que ocurre en la calle, los demás no tienen roles asignados. Detrás de cámaras, además de Andrés Sena, trabajan Juan Bulmini y la estudiante de periodismo Carolina Badano, mientras que Rodrigo Guillenea se ocupa de la parte artística.

En tiendas de Teledoce, la gerencia empezó por designar a Alexandra Morgan como directora del proyecto y con Silva empezaron a barajar nombres. "Yo quería trabajar con Juan Andrés Elhordoy, al que conozco hace muchos años —cuenta el periodista— y que me parece una especie de cirujano en materia periodística, es un tipo que apunta a un tema y lo maneja como pocos. También quería a Joel Rosenberg, pero tiene mucho trabajo actualmente". Dado que Eugenio Restano pretendía incorporar algún periodista más, Morgan propuso a Carina Novarese, a la que Silva no conocía. "Como a mí me gustan los equilibrios, gente muy joven y gente con mucha experiencia, le pedí a Alexandra contar también con un periodista que sepa mucho más que yo. Ella dijo ‘voy a llamar a Alfonso...’, no llegó a pronunciar la ‘L’ que yo enseguida le dije ‘mi sueño es trabajar con Alfonso Lessa’, al que conozco hace muchos años, he leído todos sus libros y con el que trabajé en ‘Agenda confidencial’ leyendo sus textos. Es un sueño hecho realidad, me ordena periodísticamente". La producción se completa con Florencia Traibel (asistente de producción periodística), Valeria Luzardo (producción ejecutiva), Nicolás De Maio (asistente de producción ejecutiva), Guillermo Amoedo (asistente) y Garo Arakelián (diseño gráfico). Además, el programa dispone de los servicios de la empresa de opinión pública Cifra, con los aportes de Luis Eduardo González y Gonzalo Kmaid. "Una de las cosas que me gusta de este equipo es que no todo pasa por mis manos, lo mío es la parte periodística. Entonces hay cosas de las que no me preocupo y sé que van a salir bien, no soy un tipo que quiera estar en todo", acota Silva.

EL DEBUT. El día del estreno siempre es una olla de nervios, tensiones y expectativas. En ambos programas había que sumarle lo que significaba la primera vez en cámaras para la mayoría de sus integrantes, sólo se salvaban los conductores y José Sena en el caso de "Dicho y Hecho". "El primer día estábamos todos muy nerviosos, pero ahora ya hacemos chistes. Larry King dice que si vos no disfrutás, la gente menos. A veces vos disfrutás y la gente no. Si te vas para el lado de lo distendido, se convierte en una charla de boliche, y si te ponés muy tenso, sale mal, y la gente percibe que algo anda mal", señala Sotelo, un hombre con varios periodísticos en su haber que, en este caso, se ocupa de ordenar y guiar las diferentes voces que intervienen en el programa, además de realizar entrevistas.

Algo similar se vivió en "Código País", el primer programa propio de Aldo Silva en Teledoce. "Después del primer programa yo estaba muy orgulloso de Juan Andrés y Carina. Sabíamos que había mucha pantalla caliente, a esa hora la programación de los tres canales tenía cosas fuertes. Fue un debut a mil, se había generado expectativa, lo percibíamos", recuerda el conductor, ahora más aceitado en un rol de conductor-entrevistador que a muchos sorprendió. "Hubo gente que rechazó la forma de entrevistar, principalmente la mía, y hubo gente que dijo ‘che, qué bien, apuran al entrevistado’. A mi me decían ‘qué simpático, qué ameno que sos’ y cuando me vieron en una entrevista muy incisiva dijeron ‘es otro’. Son los roles que uno tiene que cumplir, yo no inventé nada. La gente descubrió una faceta que no aplico en ‘Telemundo’ porque sólo conduzco el informativo".

PRIMERA ETAPA. Los tiempos electorales están marcando que los primeros programas de estos dos nuevos ciclos estén casi que a servicio exclusivo de la información política. Pero la idea es otra... se hace difícil, pero es otra.

"‘Código País’ pretende trascender las elecciones. Lo que pasa es que surgimos en el contexto político y a mí el tema político me importa mucho. Estamos intentando, a la vez de ser humildemente la referencia política, también estar en los temas que nosotros consideramos que en la semana tienen un impulso muy grande. Pretendemos meternos en temas que marcan la pauta cotidiana del uruguayo y trabajar en ese entorno. Lo vamos a poder hacer libremente cuando pasen las elecciones", manifiesta como expresión de deseo Silva, sin olvidar que, de todas maneras, después de octubre, o noviembre, los tiempos políticos no habrán terminado. "Las semanas posteriores a la elección van a ser muy importantes por todo lo que tiene que ver con el armado de un nuevo gobierno, el nombramiento de los ministros, los primeros meses de gobierno. Tenemos política por unos meses más, el tema es que no queremos aburrir a nadie. Si bien es cierto que establecimos una línea de trabajo, estamos muy atentos a lo que dice el público", agrega.

El formato de "Código País" es una entrevista central que Silva realiza en solitario en los primeros bloques y a la que luego se suman Novarese y Elhordoy. Posteriormente llega el aporte de Cifra y, si el tiempo lo permite, se aborda algún otro tema. "Queremos tener expertos, alguien que pueda redondear conceptos o esclarecer temas más allá de lo que es la noticia. Lo ideal sería meternos en profundidad en dos temas por programa", explica el conductor.

Por el lado de "Dicho y Hecho", un programa en el que se tiran los temas y cada panelista aporta lo suyo desde su formación y experiencia, "la idea es rescatar o incluir dentro de la propuesta lo que tiene la campaña política de central, la confrontación de ideas, el color de la campaña, los actos políticos, los clubes, la agitación política... eso que la gente ve poco y nada porque los informativos cubren actos donde lo único que se ve es al candidato hablando en el escenario. También queremos dar información en el sentido estricto de la palabra. Los programas políticos en la televisión uruguaya en general eran programas de entrevistas. Néber Araújo hizo algo distinto, incluyó otro tipo de informes. Nosotros pensamos en un público de televisión, no sólo en el que le interesa la política", aclara Sotelo.

SEGUNDA ETAPA. La forma en que el país maneje los tiempos políticos más allá de las elecciones será lo que sin duda marcará el camino para estos dos periodísticos y determinará si podrán o no escapar a los temas estrictamente políticos o económicos. El objetivo es ir más allá pero, hasta en el calendario que pautan para el desarrollo de sus ciclos, la política es prioridad. Ambos piensan en estar al aire hasta diciembre, parar en enero y retornar en un febrero que será muy movido: se renovará el Parlamento, se vivirá a pleno la transición y preparación del nuevo gobierno, y se estará a un paso del cambio de mando.

Mientras siguen adelante en lo suyo, seguros de que van por el camino correcto con estilos y enfoques diferentes, Silva y Sotelo celebran de que haya varias opciones para el televidente. "Son propuestas diferentes, a mí me gusta mucho el programa de Gerardo, me entretiene", dice el primero y el segundo parece devolverle la sincera gentileza al manifestar que "yo creo que la competencia es un recurso fantástico para mejorar la calidad de los productos. Es mucho mejor tener con quien confrontar, aunque sea tu amigo. Aldo crecerá como profesional en lo que haga mejor y yo haré lo mío, y finalmente vos estás en tu casa mirando y podés elegir".

Libre elección entre propuestas que aportan estilos novedosos y caras nuevas. La televisión nacional estaba reclamando esta bocanada de aire fresco, sobre todo en lo que a política refiere.

Analía Filosi

Fotos: José Plá