Famosos en Facebook

1/1:  20091127 Guillermo,Lockhart 464x600 (El País)

Por: Silvana Nicola

La tercera temporada de Voces Anónimas no está al aire, sin embargo los seguidores de Guillermo Lockhart ya conocen su presentación y saben cómo se hizo. Marcel Daset desapareció durante dos semanas y sólo volvió a Terapia de Pareja el miércoles pasado. No todos supieron el por qué. Laetitia D`Arenberg cuenta sus pasos casi en un "minuto a minuto". Todo esto sucede en Facebook, una red social donde -por trabajo o por placer- los integrantes del star sistem local dicen presente. Sábado Show se dedicó a mirar atentamente algunos muros y saber qué cuentan y qué muestran algunos famosos.

Guillermo Lockhart es el "Roberto Carlos" de facebook: tiene 10.130 seguidores en la red. Día a día acepta nuevas solicitudes y al llegar a 5.000 amigos, suma un nuevo grupo. Así las cosas, entre sus tres grupos, mantiene cautiva la audiencia de su programa, le cuenta en qué está, comparte videos y fotos, desde trabajos como modelo hasta algunas de reuniones familiares. En su caso, apostar al Facebook parece un acierto. En tanto no está en la pantalla de La Tele, Lockhart se asegura de seguir cautivando a su audiencia, ya sea con la venta de un libro, un DVD (la leyenda de Dionisio Díaz, por ejemplo) o una promoción, como la que organizó junto a la red Abitab y llevó a dos personas a las Halloween Horror Nights en los estudios Universal.

TODOS LOS DÍAS. Si Lockhart es inalcanzable en cuanto a número de amigos, Martín Sarthou es el "rey del posteo". Ante sus amigos, diariamente el conductor de Telemundo 12 actualiza su "frase de estado" e incluso puede cambiarla varias veces en una misma jornada. Según él mismo contó a Sábado Show, en general, escribe cosas sueltas. "Una línea de una canción, una frase de un diálogo de una película o algo que puede resultar absolutamente incomprensible -como "25 + 14 = un Munny escuchando a Gilda"- que para alguien tiene mucho significado, es un guiño. Nada raro, creo que lo mismo que hace la mayoría de la gente".

Por lo general, mantiene deshabilitado su muro -cuando estaba habilitado podía sumar decenas de comentarios en minutos- para que alguien postee algo y no deja más de dos o tres cosas escritas. Lo habitual es que tenga uno o dos videos, un enlace a un artículo periodístico o a algún link de fotografía "bueno" para compartir.

No censura temas, pero los evita. No hace manifestaciones ni comentarios sobre temas políticos, sobre el trabajo o sobre colegas u otras personas. Pero, según relata, en mensajes privados sí mantuvo encendidas discusiones. Fotos mediante, cualquier amigo de Sarthou puede recorrer su historia. Tiene "colgados" 27 álbumes que incluyen viajes profesionales (Líbano, Israel, Chiapas, Perú, Quito, Irlanda del Norte) y algunas pocas de su familia que no incluyen a su hija y si lo muestran a él con sus padres y su hermano.

"Trato de mantener la privacidad en la medida de lo que es lógico y normal. No se me ocurre poner "estoy en la Plaza Cagancha", si quiero decirle algo a un amigo o amiga lo hago por teléfono, no por facebook". El periodista ya supo tener un Facebook de unos 5.000 integrantes, pero optó liquidar con ese descontrol y hacer un barrido. "El primer año sólo aceptaba amigos y conocidos y sumaba a personas que quería reencontrar. Después me pareció muy antipático apretar el botón "ignorar" y me dije listo, acepto a todo el mundo y se acabó el problema. Pero con el tiempo me di cuenta de que no es recomendable, ahora entre los que estamos está todo bien y cuido mucho más a quién sí sumo y a quién no". El cuidar su círculo no lo inhibe de recibir mensajes privados o incluso fotos subidas de tono. Entre los pedidos más insólitos dos le llamaron la atención: una mujer que le preguntó si podía cuidarle el hijo porque quería ir al cine con su marido y una chica de 16 años le pedía insistentemente que en verano alquilara en Cuchilla Alta la casa que estaba frente a la suya.

El camaleón. Sin pelo. Con pelo. De rubio platinado, pasando por varios tonos hasta llegar a pelirrojo. Toda la mutación de Marcel Daset -incluido el color de sus ojos- está en 26 álbumes de fotos de facebook y unos siete videos que recuerdan los comienzos en la televisión de quien hoy declara: "Soy feliz. Estoy transitando el mejor año de mi vida en todo sentido. Tanta felicidad me da miedo. Soy invencible, nada puede detenerme. Cada día es único. La vida es maravillosa. Vivo y trabajo desde el amor".

El facebook de Daset está preparado para que sus 1.144 amigos sepan todo de él. Con plena conciencia de su mediatez, sus álbumes incluyen títulos como: "fotos para la prensa", "look colorado", "carrera con las estrellas" o "Marcel Daset en eventos". Es imperdible detenerse en "Marcel Daset con famosos", donde cientos de tomas lo retratan junto a personajes de la farándula. Las fotos van desde Carlos Calvo, Donald, Soledad Pastoruti, Marcelo de Bellis, Carlitos Perciavalle, Pipo Cipolatti, Beatriz Salomón, Juan Carlos Calabró, Nazarena Vélez, Wanda Nara o Pablito Ruiz.

Literalmente Daset tiene de todo en su muro y siempre suma algún anuncio, como el que hizo hace algunos días contando que durante dos semanas no aparecería en TV hasta el miércoles pasado, cuando estrenó su tema musical en Terapia de pareja. Este muro no conoce de censuras ni de limpiezas, Daset no limita número de comentarios ni borra los mensajes que le escriben, que van desde deseos de éxitos hasta pedido de permiso para etiquetarlos en fotos ajenas.

Cuatro perfiles. Mónica Willengton maneja varias cuentas. Una personal, una profesional, una de De fiesta magazine y es administradora del grupo "Intolerantes a la lactosa por información y ayuda". Todos los días postea algo: su estado de ánimo, una canción, un video, "es como el nick del msn", revela quien tiene pendientes la friolera de 680 solicitudes de amigos. Al momento de Aceptar o Ignorar, la comunicadora sigue algunas reglas, tales como fijarse si tiene amigos comunes con esa persona, leer el mensaje que incluye la solicitud o mirar la foto. A saber: no acepta personas sin foto en su perfil -"que den la cara", argumenta- y menos a quienes aparecen en paños menores. Otro de los recaudos es asegurarse de que la persona en cuestión sea quien dice ser, por ejemplo, ya confirmó que Arturo de la Cruz no es un perfil de Cacho, sino de alguien que usa su nombre y una foto del conductor de La Tele. "Hay muchos perfiles falsos", advierte.

En cuanto a sus propias fotos, tiene algunos recaudos: no mostrar su casa o dónde queda y tampoco subir tomas muy domésticas, ni de ella ni de sus hijas, María Fernanda (16) y Milena (9). También es cuidadosa a la hora de mantener su muro: no acostumbra dejar escrito nada que haga publicidad de productos o espectáculos y tampoco pedidos de dinero o similar. Las ofensas para ella o terceros tampoco corren con suerte.

El facebook está instalado. Y si no lo cree, pasen y vean. Con una simple búsqueda podrá encontrar a Michell de León (con fotos de cuando trabajaba con Cacho de la Cruz), Patricia Wolf, Gustavo Escanlar, Sara Perrone, Adriana da Silva, Antonio Ladra, Jessica Zunino, Abigail Pereira, Luis Alberto Carballo, Gustaf y muchos más.

La sexóloga Carolina Villalba cuenta con 5.000 amigos en su perfil y ha llegado al límite. Más de 4.000 aguardan en lista de espera por lo que Villalba tomó una decisión: abrió un grupo de fans que ya va por los 2.000 miembros. La sexóloga se toma en serio su actividad virtual y allí responde a consultas e invita a sus amigos a las distintas actividades teatrales. "Los primeros 10 comentarios se ganan 10 entradas para ver Compenetrados", postea por ejemplo en referencia a la obra que comparte con Luis Alberto Carballo en el Teatro del Centro.

A propósito, Carballo también tiene Facebook, pero se declara "un superado". Aceptó a todo el que le pidió la amistad y ahora llegó al tope y no sabe qué hacer. Rara vez postea o responde: "Es mucha gente la que pregunta".

La princesa Laetitia D`arenberg, en cambio, ha hecho del Facebook un verdadero diario de sus actividades. Sus 4.874 amigos reciben hora a hora el desarrollo de su actividad, tanto empresarial como en los medios.