Joel Rosenberg
Comprar vinos de Uruguay "equivale a comprar jugadores de fútbol de Venezuela", señaló José Luz Alvim, presidente de la filial de San Pablo de la Asociación Brasileña de Sommeliers en un artículo publicado el 26 de noviembre en la revista brasileña Veja.
En al artículo, el especialista brasileño atacaba a una empresa de su país, Vinícola Aurora, que compra vino uruguayo y lo vende bajo su propia marca, aclarando el origen del producto. Para Luz Alvim, el vino uruguayo es malo y su venta poco menos que una ofensa al público brasileño.
En el artículo de la revista se detalla que Vinícola Aurora compró en 2003 a Uruguay el contenido de 700.000 botellas de 750 centilitros que fueron comercializadas en Brasil con botellas y rótulos brasileños. Según Veja, los consumidores tienen poca chance de enterarse que el vino de esas botellas es uruguayo ya que bajo la misma marca se venden vinos brasileños y son pocos los que se fijan en la letra chica de la etiqueta para ver el origen del producto.
Según el artículo, las ventas de vinos brasileños aumentaron 20% en los últimos cinco años y, como no todos los productores tenían previsto este crecimiento, la solución para atender la demanda fue comprar vino de Argentina o Uruguay y colocarlos dentro de botellas con etiquetas de las bodegas brasileñas.
El artículo escrito por la periodista Fernanda Medeiros contiene una recomendación: "antes de elogiar o criticar un vino nacional que escogió dé una buena mirada a la etiqueta. Puede ser que el vino sea argentino o uruguayo".
Medeiros señaló que el vino argentino no tiene calidad superior al brasileño y que en el caso de Uruguay la desconfianza es aún mayor.
El ingeniero Francisco Zunino, secretario ejecutivo del Instituto nacional de Vitivinicultura (Inavi) dijo que el artículo de Veja contiene un montón de "inexactitudes" y que, al referirse de ese modo agresivo a los vinos uruguayos, "desconoce una cantidad de reconocimientos y premios internacionales de los últimos años".
Además, Zunino aclaró que no hay engaño a los consumidores brasileños. "Estas etiquetas cumplen con el reglamento vitivinícola del Mercosur. Está señalado que el vino es uruguayo en el tamaño legal, y está controlado por Inavi".
Daniel Pisano, presidente de la Asociación de Bodegas Exportadoras (ABE) fue más enérgico para referirse a la crítica del sommelier brasileño. "La expresión del hombre es equivocada y está teñida de nacionalismo".
Pisano explicó que el vino de la variedad Cabernet Sauvignon, al que se hace referencia en el artículo "es un vino modesto pero de buena relación calidad-precio. Además, estos vinos son aceptados hace muchos años en Brasil".
Vinícola Aurora realiza desde 1998 el procedimiento de comprar los vinos en Uruguay y embotellarlos con sus recipientes y etiqueta. Con esta operativa Uruguay exportó desde 1998 un promedio de un millón de litros por año, según datos proporcionados por Miguel Aguerre, responsable de Aurora en Uruguay.
Aguerre aclaró que lo que su empresa compra en Uruguay conforma una pequeña parte de sus ventas, ya que Aurora procesa 60 millones de litros de vino por año. Sin embargo, para el mercado uruguayo este tipo de operación tiene una gran importancia.
Para atender los pedidos de Aurora y bajo la supervisión de técnicos brasileños, en Uruguay trabajan tres enólogos, y se contrata una empresa que se encarga de la vinificación y otra para el envasado. La materia prima se obtiene de 25 productores de Canelones y Montevideo.
Para Aguerre la nota de Veja tiene un claro "sentido comercial" y obedece a que "el mercado de vinos brasileños ha sido muy golpeado en 2003 por una importación de muchos millones desde Portugal".
Más allá del caso de Aurora, Pisano y Zunino mostraron preocupación por los comentarios despectivos acerca del vino uruguayo vertidos en la prensa brasileña ya que ese país es el principal mercado de este producto uruguayo.
"No hemos cerrado los datos del 2003 —dijo Zunino— pero cerca del 60% de los dos millones de litros exportados este año fueron vendidos a Brasil".