TURF

Quienes conocían a “Panchito” Costa sabían de su amor hacia la hípica.

Soñador, propietario, trabajador incansable en pos de la mejora de la hípica nacional.

Creador del Museo del Turf, una página, un lugar que no solo te llevaba al nacimiento de nuestro turf, te trasladaba a los inicios de las carreras de caballos.

“Panchito” vivía por y para el turf. Muchos de sus amigos lo hicieron sentir en redes. Muchos se han comunicado lamentando su desaparición física, como la Asociación de Criadores, que nos mando una carta refiriendose a la partida de “Panchito”.

Los recuerdos de Albaricoque, de Tintillo y de tantos otros pingos que tuvo “Panchito”, con los colores del FB o con chaquetillas amigas.

El querido Luis Costa Baleta nos dejó trabajando para nuestro turf, en su casa, rodeado de la historia misma de un deporte al que abrazo desde muy joven.

“Panchito” fue un gran turfman. Sabemos tendrá su reconocimiento desde el próximo fin de semana. Su Museo, su legado debe continuar. Se le extrañará.