La 23 edición del prestigioso Rally de los Faraones arrancó ayer en las famosas pirámides de Gizah, con la participación del piloto de motos franco-uruguayo Laurent Lazard.
Bajo un denso calor de otoño, un total de 47 motos, 37 coches, 4 quads y tres camiones tratarán de superar en seis exigentes etapas los 2.282 kilómetros de arena —2.210 especiales— a través del denominado "Gran Mar de Dunas", uno de los desiertos más duros y peligrosos del mundo.
La mayor emoción la pondrán las motos, donde Lazard, con su KTM 660, luchará por la victoria en una carrera que afronta como banco de pruebas de lujo para la 28a. edición del rally París-Dakar.
La primera etapa discurrió ayer entre El Cairo y el oasis de Bahariya, un inmenso palmeral que en la época posfaraónica y prerromana fue el lugar de asiento de una de las culturas egipcias más bellas y eclépticas.
Tras un largo período inactivo debido a problemas en su espalda a causa de una caída hace un año, Lazard se ha venido preparando para la competencia y entrenando en nuestro país desde el mes de julio.