SHANGHAI - El finlandés Kimi Raikkonen ganó hoy con Ferrari el Gran Premio de China de Fórmula 1, escoltado por el español de McLaren Fernando Alonso, por lo que el campeonato se definirá en la última carrera del año, en Brasil, ya que Lewis Hamilton, que hoy podía conquistar el título, abandonó.
El inglés, el primer piloto negro en la historia de la categoría y ganador ya de varios récords, tuvo problemas de neumáticos en un Gran Premio complicado por la lluvia e ingresó con dificultades a boxes a mitad de carrera, circunstancia en la que, dijo, cometió un error que lo dejó clavado en la leca y que a la postre reabrió la disputa del campeonato.
Hamilton quedó así con 107 puntos, Alonso tiene 103 y Raikkonen 100, en un final electrizante para una temporada que estuvo plagada de polémicas y controversias, al punto que el equipo más ganador y eficaz, McLaren, está expulsado del campeonato por equipos, en tanto sus pilotos están enfrentados.
Raikkonen dio la victoria número 200 a Ferrari y se erigió además como el piloto hasta hoy más ganador del año, con cinco triunfos, frente a cuatro de Hamilton y Alonso.
Hamilton largó desde la pole con corrección, cuando lloviznaba y el pronóstico preanunciaba un aguacero que no se concretó, escoltado por Raikkonen, en tanto Alonso sobrepasó a Massa en las primeras curvas, pero el brasileño recuperó después la posición.
Hasta la primera tanda de ingresos a boxes, a partir de la vuelta 15, el inglés dominó con comodidad y parecía asegurarse la consagración en su primer año en la categoría, pero sus neumáticos para lluvia no fueron cambiados y sus tiempos comenzaron a bajar bruscamente en la vuelta 28.
Un giro después Raikkonen lo asedió agresivamente y al perder el inglés el radio ideal lo superó. Los problemas de Hamilton fueron tan notables que no pudo sostener el nivel de marcha del italiano Jarno Trulli, con una vuelta menos.
Alonso se aproximó también al segundo lugar de Hamilton, quien apenas controlando el auto entró a boxes pero no pudo mantenerse en la calle de ingreso y se fue a la leca, de la que no pudo salir.
Los neumáticos, que según dijo hoy mismo la prensa española antes de la carrera perjudicaron a Alonso en la clasificación del sábado, en verdad le dieron al piloto de ese país la posibilidad de conservar el título de campeón, que ganó dos veces con Renault, en la definición de Brasil, dentro de dos semanas.
Hamilton abandonó en la vuelta 31, cuando la llovizna complicó a varios pilotos, al punto que el polaco Robert Kubica se quedó transitoriamente con el liderazgo con su BMW, aunque después tuvo problemas mecánicos y debió abandonar.
La carrera quedó en manos de Raikkonen y Alonso, que fueron intercambiando mejoras en sus tiempos pero sin que sus posiciones pudieran aproximarse como para una puja directa.
El piloto inglés explicó las circunstancias de su abandono: "No me di cuenta de que la goma estaba dañada y cometí un error al ingreso de la línea de boxes. Sucede".
"Aún puedo lograrlo", remató sobre la definición en Brasil, después de saludar uno a uno a todos los miembros del equipo McLaren.
ANSA