JOSÉ MASTANDREA
No se salvó ni el "Coco" Alfio Basile. Y ahora los dardos apuntan a la cabeza del "Cholo" Simeone, al frente de River Plate argentino. Son las reglas de juego.
El fútbol es así: "mandan los resultados", dicen los propios entrenadores que deciden dar un paso al costado cuando no encuentran el rumbo.
Y el Uruguay no es la excepción. La primera víctima de la temporada fue Luis López. El técnico que sorprendiera en el pasado Torneo Clausura con Rampla Juniors no pudo repetir al frente de Juventud de Las Piedras y tras la derrota frente a Central Español (1-3 en la quinta fecha) fue cesado.
Hoy, uno de los técnicos que camina por la cornisa es, precisamente, su verdugo: Luis Garisto. El experiente entrenador no ha podido enderezar a los palermitanos. Ganó ese encuentro ante Juventud y después sólo cosechó derrotas o empates.
Los hinchas que fueron al Parque Luis Franzini ya hicieron notar su disconformidad: "lo peor es que ya jugamos con todos los que están abajo y sólo le ganamos a Juventud", dijeron.
Esta fecha puede resultar decisiva para su continuidad. Una derrota lo alejaría del cargo.
Un caso similar parece ser el de Pablo Hernández al frente de Villa Española. Es la contracara de Garisto. Recién está haciendo sus primeras armas como entrenador y se encontró con un club con muchas carencias. Pero eso al hincha le importa poco y nada: quiere ganar. Es otro de los que camina por la cornisa. El peor encuentro fue ante Bella Vista y uno de los mejores ante Danubio. Perdió los dos.
El domingo tiene un viaje de arena gruesa. Se mide ante un entonado Defensor.
Pero Garisto y Hernández no están solos.
La racha negativa de Danubio actuó como un boomerang contra Martín Lasarte que en un par de fechas pasó del cielo al infierno.
Los de la franja hace tres partidos que no ganan y eso dejó con los nervios de punta a gran parte de su hinchada.
Ya en el encuentro frente a Racing (1-3 en Jardines) aparecieron los silbidos y las recriminaciones para el entrenador: "¡cambiá la defensa que es un desastre!", gritaron desde la tribuna oficial.
El cuarto en discordia es Wilmar Cabrera al frente de Cerro Largo. Su equipo no ha ganado y encendió la luz roja. Otro que se juega mucho este fin de semana. No hay secretos. El fútbol es así: "mandan los resultados".
Villa Española: Pablo Hernández también sufrió recriminaciones
Con recursos limitados y casi sin hacer una pretemporada, salió a la palestra. Villa Española es de los equipos que todavía no conoce la victoria en el Apertura. Hasta ahora sumó tres derrotas y otros tres empates.
Danubio: Martín Lasarte fue abucheado por los hinchas
El comienzo de Danubio en el Torneo Apertura fue espectacular: cosechó cuatro victorias consecutivas y se mantuvo como líder. En la quinta fecha cayó con Tacuarembó y empezó la debacle. Hace tres encuentros que no gana.
Cerro Largo: El último partido dejó a Wilmar en la cuerda floja
El empate del pasado fin de semana frente a Liverpool (con siete jugadores) ambientó la dura reacción de los hinchas. Cerro Largo no logró ganar en estas primeras siete fechas del Apertura. Wilmar está en el ojo de la tormenta.
Así están
Central Esp.
Es uno de los equipos más comprometidos en la tabla del descenso. Tiene 38 puntos y Bella Vista ya se le puso a cinco unidades. Racing, que duplica, le pisa los talones. Hasta ahora, ganó un solo encuentro. Tiene seis puntos en el Apertura.
Danubio.
No está complicado en el descenso pero sus hinchas se acostumbraron a ganar y ya exigen campeonatos. Los de la franja están sextos en el torneo con 12 unidades. Es el único equipo que no empató.
Así están
Juventud.
El conjunto pedrense hoy está ubicado en la última posición de la tabla. Jugó siete partidos, empató uno y perdió los seis restantes. Sólo anotó dos goles y le convirtieron catorce.
Cerro Largo.
Tiene sólo tres puntos en la tabla. Va antepenúltimo. De los siete partidos que disputó, empató tres y cayó en cuatro. Suma cinco goles a favor y recibió doce en su propia valla. Tiene a favor que duplica en la tabla del descenso por haber ascendido de Segunda.