Una roja que no fue ni amarilla

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A Martín Vázquez le tocó un partidazo, pero la goleada de Mineiro ante Arsenal igual lo obligó a tomar un par de decisiones difíciles que no sorteó bien. La patada criminal de Braghieri a Ronaldinho mereció la roja, pero no fue ni amarilla.

"Si no sacaba la pierna, podía haber sido grave", declaró el fantástico "Dinho", quien ayer dejó una muestra fenomenal de su enorme talento.

Con el partido 5-2, Ronaldinho recibió un balón a las puertas del área y el zaguero Diego Braghieri consideró una buena opción lanzarse con las dos piernas hacia adelante en dirección a la canilla derecha del brasileño. Por suerte, la velocidad del ex-Barcelona le permitió evitar la mayor parte del impacto.

Vázquez sancionó el penal –que Ronaldinho falló- pero ni siquiera amonestó al agresor.

Antes, había cometido varios errores de juicio con otras tarjetas y, según la prensa argentina, desestimado un penal a favor de los locales y anulado erróneamente un gol de Arsenal.

"El uruguayo Vázquez no observó un claro penal a Benedetto y no le convalidó a Furch un gol por supuesta una falta contra un defensor visitante", relata el periodista de Olé en su crónica del partido. "Igualmente, la diferencia entre ambos fue evidente", sentencia.