Los botijas son el orgullo tricolor

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Renato César demoró 217 días en devolverle el favor a Gonzalo Bueno, pero finalmente saldó la deuda. Ayer le dio el pase de gol que su amigo le había hecho el pasado 15 de abril, cuando el fernandino conquistó el 6-1 ante Cerrito en el que hasta ayer había sido su único tanto en Primera. El "Chavo" Díaz confió en una delantera juvenil y le cumplieron, sobre todo César, quien hizo su debut en el Apertura y jugó con la solvencia de un veterano, poniéndole no sólo la asistencia a Bueno sino convirtiendo luego un gol decisivo, el del 2-1, que dio vuelta el marcador.

"Desde Sub 16 que venimos jugando juntos con `Gonza`. Apenas llegué a Nacional ya nos empezamos a entender muy bien. Él tiene una velocidad impresionante y en la Selección Sub 20 hace un año más o menos que también venimos trabajando juntos, así que nos entendemos bárbaro", cuenta. "De repente en los primeros minutos no arranqué de la mejor manera porque estaba un poco nervioso, pero de a poco me fui sintiendo mejor y empecé a marcarle los pases al `Chino`. Después empecé a volcarme un poco más a la derecha y allí me sentí más cómodo", admitió.

Empezó como nueve, pero rindió mejor cuando pasó a jugar como puntero por derecha, intercambiando su lugar con Adrián Luna, quien precisamente le puso un pase estupendo del centro hacia afuera para dejarlo de cara al gol. "Yo había dicho que no tenía ningún drama en cambiarme con cualquiera de los dos de afuera, porque yo podía jugar de extremo. Antes de que terminara el primer tiempo el `Chavo` ya me había pedido que jugara por derecha y lo importante fue que nos mantuvimos los tres arriba, con el `Chino` haciendo lo suyo".

Por primera vez en su corta carrera el delantero de 19 años se fue ovacionado del Parque Central y no lo olvidará jamás. "Cuando vi que el cartel marcaba que salía yo y que la gente se empezaba a parar para aplaudirme se me pusieron los pelos de punta". Con Recoba se entendió muy bien y contó que cuando el "Chino" toma la pelota "en lo primero que pienso es en marcarle un pase o en amagar que voy y venir, porque la verdad que él te la deja siempre servidita. Jugar con él es una cosa de locos".

COMPADRE. Gonzalo Bueno volvió al equipo luego de haberse perdido el clásico por estar suspendido y lo hizo con gol. El puntero es, con cinco anotaciones, el artillero del equipo. "El fin de semana pasado estaba muy triste por no poder estar en el clásico y acá en el Parque quería demostrarle a la gente que me moría de ganas de jugar. Por suerte se me dio con el gol y también con la victoria", expresó.

El "Zorrito" está contento de haber jugado con su compadre César y no defraudar. "Con Renato nos conocemos hace rato y eso incide a la hora de jugar juntos, porque sabemos cómo tira el centro cada uno y a dónde va a poner la pelota el otro. Y además tenemos al `Chino`, que nos hace todo mucho más fácil. Antes del partido habíamos hablado con él que, como somos los dos rápidos, íbamos a tirarnos los centros para dejar la pelota por adelante. Estoy contento también de que él haya hecho un gol importante".

"Hicimos un buen primer tiempo. Intentamos hacer lo que habíamos trabajado en la semana: no darle la pelota a Nacional y salir rápido de contraataque. En el segundo tiempo consiguieron esos dos goles tempraneros que cambiaron el partido. Nacional tuvo la efectividad que no había tenido en el primer tiempo. Manejó la pelota y nos hizo daño".

"En el primer tiempo el partido fue parejo. Manejamos bien la pelota y tuvimos varias posibilidades de gol", dijo el hijo de la "China" Enrique Báez. "Intentamos salir rápido y en el primer tiempo nos dio bastante resultado. En el segundo sentimos esos dos goles tan seguidos", reconoció luego el futbolista que tiene sólo 17 años y fue citado a la selección Sub 20.