El día que Forlán, Godín y Lugano fueron Leyendas: la canción que cantó la Tota y el nombre que se ovacionó

La puerta del Palco del Estadio Centenario se llenó a la hora 18:50. Medios de comunicación, entrenadores y exfutbolistas acudieron a la distinción de la Mutual Uruguaya de Futbolistas Profesionales (MUFP). Diego Scotti, presidente de la MUFP, recibía a los invitados y los guiaba a dónde tenían que ir. “Gracias por venir”, les decía a todos.

El motivo era rendirles una distinción a 50 exjugadores uruguayos por sus carrera tanto a nivel local como internacional.

A la hora 19:00 estaba estipulado el comienzo de la ceremonia. Con el transcurso de los minutos muchos se ponían impacientes por un motivo y es que no estaban los tres grandes invitados: Diego Godín, Diego Lugano y Diego Forlán. Estos exjugadores, que marcaron a fuego su carrera con la selección uruguaya, iban a recibir una distinción especial que era la de “leyendas celestes”, un proyecto que promovió la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) con la entrega de medallas conmemorativas y personalizadas a aquellos jugadores que fueron votados por el público.

El primero que recibió ese galardón fue Luis Suárez el 6 de setiembre de 2024 tras el 0-0 entre Uruguay y Paraguay por Eliminatorias. Ese fue el último partido del Pistolero con la Celeste.

Godín llegó casi a las 19:00 horas. “Hola, ¿cómo están?”, exclamó el excapitán de la selección uruguaya con una enorme sonrisa. “Esto es divino. Siempre es muy lindo recibir un homenaje como estos”, sostuvo el jugador que supo vestir la Celeste en 161 partidos oficiales.

Unos minutos más tarde llegó la Tota, quien fue el capitán de la Celeste que consiguió un cuarto puesto en la Copa del Mundo en Sudáfrica 2010. Atendió a los medios, pero vio llegar al creador de esa gesta en tierras africanas, Oscar Washington Tabárez, y se lanzó para poder saludarlo. Incluso armó una foto de él con el maestro y una hincha que quería retratar ese momento.

Forlán fue el último en arribar al Estadio Centenario. Ingresó y procedió a irse donde le había indicado las autoridades del evento, ya que debía arrancar.

Foto: Alberto Sobrero.

El escenario se montó en el campo de juego mirando de frente a la Platea América y el Palco. Los tres mundialistas en Sudáfrica 2010 y Brasil 2014 se sentaron en la primera hilera de asientos de la Platea América contra la cancha.

La temperatura estaba en torno a los 18 grados, aunque había mucho viento y se sintió. “Está frío, che”, esbozó Cachavacha en su caminata rumbo al asiento.

El primer gran momento de Lugano en la noche se dio cuando Eduardo “Pitufo” Lombardo cantó “Descolgando el cielo”. La Tota la tarareó y la aplaudió con una enorme sonrisa, un tema que tiene mucho de lo que es Uruguay y la pasión con la que se vive el fútbol.

Forlán, Lugano y Godín no pararon de hablar entre sí. Se sentaron en la misma hilera, aunque el Faraón estuvo acompañado por Gonzalo Viera con quien supo levantar su último título en el fútbol uruguayo: la Copa de Clubes de OFI en 2024.

El primero en subir al escenario fue Diego Forlán, luego Diego Godín y cerró ese homenaje tan especial Diego Lugano. “La selección fue mi vida”, detalló el Faraón.

“Siempre son lindos estos homenajes por parte del público”, manifestó Forlán al recibir la distinción en el estrado. En tanto que Lugano recordó a la persona que dio el puntapié inicial de esa generación de futbolistas. “Quiero saludar al maestro Tabárez que está acá”, apuntó y se escuchó el gran aplauso de la noche en el Centenario.

Los tres bajaron juntos y se oyó otra gran ovación. De esta manera, saben, que a partir de ahora, pasaron a ser leyendas celestes.