Con artillería pesada

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DANIEL ROSA

"Me sentí mejor de lo que esperaba". Botella de agua en mano y en el pasillo hacia el vestuario visitante del espectacular complejo de Fénix, Bruno Fornaroli comentó su primera impresión sobre su nuevo puesto. Jugó su primer partido como volante por la izquierda y la prueba ensayada por Juan Ramón Carrasco salió bastante bien.

El equipo titular de Nacional igualó a 1 ante el de Fénix luego de 50 minutos de fútbol divididos en dos tiempos de 25`. El "Morro" García anotó el 1-0 parcial para los tricolores a los 10` y Hernán Novick, en una jugada en el que todo el mérito se lo llevó Maximiliano Pérez, empató a los 31`.

"Jugamos bien y yo me sentí muy cómodo. Prefiero jugar en esta posición a hacerlo por afuera, porque tengo la costumbre de moverme por el medio y terminamos chocándonos con el `Morro` en el área. En cambio, en esta posición me puedo mover por el medio, vengo con panorama de cancha, el arco de frente y siempre ando rondando cerca del `Morro`, que baja pelotas muy bien", expresó entusiasmado el "Tuna", quien también dijo estar un tanto sorprendido "porque quedé varias veces en posición de gol. Incluso el nuestro llegó de una pelota que no pude definir yo abajo del arco".

Efectivamente, el ataque de Nacional elaboró una buena llegada por la derecha con Tabaré Viudez, llegó el centro y por el medio y al borde del área chica Fornaroli tuvo el gol, pero le interceptaron el remate en la línea. García recogió el rebote y sacó un fuerte remate que se transformó en el 1-0.

Los equipos. Nacional formó con Leonardo Burián; Gonzalo Godoy (Gabriel Marques), Alejandro Lembo (Jadson Viera), Sebastián Coates, Christian Núñez; Mathías Cabrera, Facundo Píriz (Maximiliano Calzada), Bruno Fornaroli; Tabaré Viudez, Santiago García y Richard Porta (Nicolás Vigneri).

Fénix alineó a Óscar Castro; Martín Cardozo, Santiago Fosgt, Jonathan Píriz, Christian Machín; Gonzalo Papa, Claudio Rivero, Maximiliano Bajter (Hernán Novick); Luciano Cardinalli, Román Cuello y Maximiliano Pérez.

Apuntes tácticos. Tal como se preveía, más que un tercer volante, lo que Carrasco consiguió con Fornaroli fue un cuarto punta. En realidad no es nueva esta apuesta del entrenador tricolor, porque ya la había hecho anteriormente con Horacio Peralta y Tabaré Viudez, sin mucho éxito.

Fornaroli, en cambio, le dio otra dinámica a la ofensiva y la explicación parece pasar por su vocación de centrodelantero. A diferencia de Peralta y Viudez, dos que juegan por las bandas y cuya característica es driblear en velocidad, el "Tuna" posee un instinto natural para desmarcarse, postearse y buscar permanentemente tirar paredes. Se sacrifica creación, es verdad, porque para esa función queda exclusivamente lo que pueda aportar Mathías Cabrera, quien ya de por sí tiene el compromiso de colaborar en marca con Facundo Píriz, algo que "JR" no le pide a Fornaroli. No obstante, se logra que la pelota esté mucho tiempo en campo contrario, porque o bien Fornaroli se postea en el medio para tirar paredes en la salida con el "Pichón" Núñez o bien salen pelotazos que el "Morro" baje para el "Tuna" u otro compañero, pues hay un movimiento constante en ataque.

Lo que se debe corregir es en defensa, porque Fornaroli no baja y quedan muchos metros entre él y Núñez, aunque parece un riesgo calculado.

Durante el partido de los suplentes, Juan Ramón Carrasco se dedicó a darle las indicaciones finales a Bruno Fornaroli. El técnico prácticamente no le prestó atención al juego de primera hora.

Nacional se puso en ventaja a los 10 minutos con un gol de Santiago García, quien tomó un rebote luego que le sacaran en la línea la pelota a Fornaroli y, entre muchos jugadores de Fénix, remató fuerte.

El "Tuna" se paró en mitad del terreno y su prioridad fue atacar. Defendió poco, pero manejó bien la pelota, explotó con acierto los espacios y llegó varias veces a posición de gol. Jugó como para ser titular ante El Tanque.

El partido por momentos se "picó" por un par de entradas duras. En el primer tiempo hubo una contra Román Cuello y el "Polaco" Claudio Rivero se enojó bastante con Mathías Cabrera. Hubo reproches entre varios.

Al terminar el primer tiempo y luego de los problemas en la cancha, Juan Ramón Carrasco dio algunas indicaciones a su jugadores y cruzó el campo para pedirles calma a los futbolistas de Fénix.