AUF dará apoyo económico a clubes para que aumenten ingresos por derechos de TV: la historia detrás de este anuncio

A la espera de que finalice el contrato con Tenfield, Ignacio Alonso indicó que la AUF "pondrá mecanismos que financien la espera y generen alternativas para poner pisos a los valores del fútbol uruguayo".

Sede de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF).
Sede de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF).
Foto: Fernando Ponzetto.

Redacción El País
En la noche del lunes asumieron las nuevas autoridades de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) tras una extensa conferencia de prensa encabezada por el presidente Ignacio Alonso, quien comenzó su segundo mandato al frente de la organización. En la misma conferencia, el mandatario anunció el subsidio que la AUF entregará a los clubes a partir de 2024 mientras aguardan por la finalización del contrato de los derechos de televisión.

La intención es que el aporte mejore el “flujo de pagos” de parte de la organización hacia los clubes, que actualmente reciben dinero cada cuatro meses: “Los clubes hoy no reciben dinero mensual, sino de manera cuatrimestral y unas tres veces por año, con un pago muy menor en seis semestres. Es parte de lo que hay que corregir: hay que mensualizarlo porque las obligaciones de los clubes son mensuales y hasta a veces quincenales. Se va a realizar de esa manera”.

Desde las arcas de la asociación, entienden que la medida surge como un “régimen de adelanto” en miras a la finalización del acuerdo por los derechos televisivos con la empresa Tenfield (diciembre 2025). Ese dinero, si bien no fue especificado por el mandatario, superaría los US$ 10 millones. Además, se espera que en 2025 las instituciones reciban un nuevo subsidio.

"Tenemos la posibilidad de generar alternativas para no apurarnos en vender y la AUF las pondrá arriba de la mesa. Pondrá mecanismos que financien la espera y generen alternativas reales para poner pisos importantes a los valores de derechos del fútbol uruguayo", explicó Alonso.

El paso a paso hasta este momento

Este anuncio viene atado a la lucha que iniciaron los entonces futbolistas de la selección uruguaya hace casi una década una atrás y que luego se trasladó a los jugadores del medio local.

Entres 2013 y 2015 los futbolistas celestes, entonces encabezados por figuras como Diego Lugano, Diego Godín y Luis Suárez, levantaron la voz pidiendo recuperar los derechos de imagen para que volvieran a la AUF y no fueran en manos de la empresa dueña de los derechos de TV. En 2016 se llegó a un acuerdo entre la AUF y los jugadores, donde la asociación recuperó sus activos: sponsors, partidos amistosos, etc.

En ese mismo 2016 lo los clubes tuvieron que decidir entre Puma (marca conseguida por Tenfield) y Nike (patrocinada por los futbolistas) para vestir a la selección. Entonces la asamblea eligió la segunda propuesta, lo cual llevó a que la marca alemana tuviera que igualar la oferta (a través de Tenfield) para seguir equipando a la Celeste. Esto supuso un incremento importante en el monto de auspicio y en la cantidad de prendas y materiales entregados a la AUF. Fue un punto de quiebre.

En ese año también año el movimiento denominado "Más unidos que nunca", que nació en el seno de la propia selección, se trasladó al fútbol local con el objetivo de aumentar los ingresos en los clubes. Para finales de 2017 los jugadores del fútbol de nuestro país juntaron entre 600 y 700 firmas para impedir que el contrato de televisión del fútbol uruguayo sea extendido hasta 2032.

En 2018 llegó la intervención de FIFA. Se instaló una comisión interventora que, entre otras cosas, hizo que el estatuto nuevo se aprobara. Los jugadores eligieron a Pedro Bordaberry como presidente del Comité de Regularización de la AUF. Bajo su mandato se eliminó la clásula de igualación que tenía la empresa dueña de los derechos televisivos. Asimismo se dio el puntapié incial a la señal de AUF TV.

Con el nuevo estatuto, la asamblea de clubes dejó de controlar a la AUF y se creó un Congreso que incluyó a varios estamentos del fútbol, no solo a los clubes profesionales. Por ejemplo, bajo el paraguas de la AUF entró OFI, el fútbol femenino, el futsal, el fútbol playa y los grupos de interés, como los futbolistas, entrenadores y árbitros.

Eso hizo que los clubes perdieran fuerza en la AUF. Antes las decisiones importantes se tomaban con 19 votos: 16 de los clubes de Primera, 2 de los de Segunda y 1 del fútbol amateur. A partir de la creación del congreso (las instituciones no tenían más remedio que aprobarlo porque de lo contrario la AUF sería suspendida por FIFA) los votos pasaron a ser 76 divididos de la siguiente manera: 32 de Primera División (doble voto por club), 14 de Segunda, 11 de los futbolistas, 9 de OFI, 6 de Primera Amateur y 1 cada cual de entrenadores, árbitros, futsal y femenino. Indirectamente perdió poder Tenfield dentro de la AUF, porque los votos de los clubes afines a la empresa de televisión (esa a la que las instituciones van a golpearle la puerta cuando precisan dinero extra) quedaron licuados entre 76. La cuenta es la siguiente: de tener los clubes el 100% del control de los destinos de la AUF, pasó a tener un 68%, es decir poco más de dos tercios. Y a esto hay que añadirle que no todos los clubes son afines a Tenfield.

En 2019, tras la intervención, se llamó a elecciones y ganó Ignacio Alonso, quien contaba con el apoyo de los líderes de este movimiento. La AUF entiende que el fútbol es el producto estrella de todos los cables y servicios de streaming, por lo que las potenciales ganancias a través de su plataforma significarán al menos el doble de ingresos para los clubes.

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