La confederación de cámaras empresariales ha manifestado su preocupación por el irracional conflicto sindical, que tiene al sector de la pesca paralizado hace un mes. Se trata de un golpe durísimo, en plena zafra, para un sector que tiene el potencial de emplear a miles de personas, pero padece de una prepotencia sindical de la peor clase. El gobierno no puede seguir mirando para el costado y debe intervenir para proteger el bien general, por sobre el fanatismo de unos pocos.