Ocho décadas de una familia dedicada al agro

PABLO D. MESTRE

Con el acento puesto en la familia, escritorio Izmendi celebró 80 años de vida.

"Somos una familia de servicio, de atender y solucionar las necesidades del hombre de campo, con el cual se han compartido todos los momentos: los de euforia comercial, los de incertidumbres económicas y las más feas como los problemas climáticos, de sanidad animal y las de serias penurias y situaciones comerciales", analizó Julio Izmendi.

El martillero recordó que la firma la inició su abuelo, Isidro V. Izmendi, en 1928. "Fue él como rematador, quien le dio el rumbo que lleva hasta ahora el escritorio". Recordó que fue un hombre que nació y se crió en el campo. Le siguieron Isidro Julio y Miguel Ángel Izmendi Denis. "Si bien mi abuelo sembró la semilla, mi padre y mi tío le dieron al escritorio la grandeza y la fuerza necesaria hasta llegar a ser un referente a nivel nacional", recuerda Julio Izmendi.

Hoy, la firma continúa con Julio y Adriana Izmendi, "con las mismas ganas y dedicación como el primer día y sin que la "tradición martillera" se detenga". Y ya comienza la cuarta generación directa de martilleros con la aparición en el mercado del rematador Juan Manuel Izmendi Odizzio.

"En todos estos años han pasado grandes colaboradores y amigos, pero fueron fundamentales todas las madres y hermanas que supimos tener y tenemos", afirmó orgulloso Julio Izmendi, recordando también a algunos "padres" como Luis Tulic, (Luisito el "Gringo"), Román González Correa, "Manuelito" Bueno Jara y a su suegro, "mi segundo padre Don Juan Manuel Odizzio".