¿Qué pasa con la economía argentina tras los últimos sucesos?

INFORME DE BBVA

La división Research del banco BBVA en Argentinaevalúa que el Producto Interno Bruto (PIB) del tercer trimestre de 2021 en ese país “fue mejor de lo esperado y alcanzó los niveles previos a la irrupción del covid-19”.

Ante ello, decidió modificar su previsión de crecimiento del PIB de Argentina para 2021 a 10% y a 3,5% para 2022.

Además, señaló que “el reciente anuncio de entendimiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) baja la probabilidad de escenarios de riesgo más adversos”.

“El gobierno y el FMI anunciaron que han llegado a entendimientos concretos de cara a un nuevo programa para refinanciar los vencimientos de deuda con el organismo entre 2022 y 2024 (aproximadamente US$ 41.000 millones). Cuando todavía falta conocer los detalles, el Ministro de Economía informó que se trata de un Programa de Facilidades Extendidas (EFF) con desembolsos en los próximos dos años y medio. Las condicionalidades macroeconómicas del acuerdo están en línea con nuestro escenario base”, señaló el banco.

Esas condicionalidades para un programa a 10 años, son: reducir el déficit fiscal hasta alcanzar el equilibrio primario en 2025, objetivos de acumulación de reservas y reducción de la emisión monetaria para el fisco desde 4,7% del PIB en 2021 a 0% en 2024.

“Consideramos que dichas metas son relativamente laxas y cumplibles en materia fiscal y cambiaria, pero exigentes en la arista monetaria (reducción rápida de la emisión y se definirán tasas de interés reales positivas)”, afirmó el BBVA.

Por su parte, “el desempleo se ubicarÍa en 9% de la Población Económicamente Activa en 2022. Luego del cierre de la economÍa por las medidas sanitarias del 2020, la recuperación del empleo mostró una tendencia hacia la precarización, con lento dinamismo de parte del empleo registrado”, explicó.

A su vez, analizó que “el gobierno sufrió un contundente revés en las elecciones legislativas y resultó debilitado de cara a sus últimos dos años de mandato. Perdió el quórum propio en el Senado y quedó con menos diputados, por lo que necesitará lograr acuerdos con la oposición para resolver los desequilibrios económicos que todavía no se han encarado”.

En ese sentido, BBVA expresó que “el ritmo de depreciación del tipo de cambio oficial aceleró tras las elecciones, aunque todavía falta recorrido para ganar terreno perdido contra los precios”.

“La política monetaria laxa y la fuerte emisión monetaria ponen un piso alto a la inflación de 2022, que proyectamos en 55%, en el marco de un ajuste de tarifas y tipo de cambio que deberá encararse este año para corregir parte de los desequilibrios acumulados”, concluyó.