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LUCÍA BALDOMIR

Textiles, cuero, calzado, madera, piscicultura y software son los sectores que los gobiernos chileno y uruguayo creen en que se pueden formar alianzas para ampliar las exportaciones valiéndose de los acuerdos comerciales que tiene el país andino.

En el marco del Congreso "Chile-Uruguay: Oportunidades de inserción internacional conjunta" autoridades de ambos gobiernos dieron ayer el puntapié inicial de lo que prevén sea un acuerdo de comercio que permita utilizar al primero como plataforma para que productos uruguayos ingresen a Estados Unidos, Europa y Asia.

El encuentro sirvió como antesala del viaje de una visita de Tabaré Vázquez junto a empresarios a Chile. Allí ambos gobierno se proponen avanzar en la firma de un tratado que evite la doble tributación, en la posibilidad de acelerar la desgravación de aranceles del Tratado de Libre Comercio (TLC) que firmó Chile con el Mercosur y en dar un paso más en la posibilidad de que Uruguay utilice los TLC del país andino como plataforma para impulsar las exportaciones, dijo el ministro de Economía, Danilo Astori.

Si bien en las próximas semanas técnicos de ambos países comenzarán a determinar las potencialidades por productos, el gerente de Comercio Exterior de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), Hugo Baiertein, afirmó que Uruguay tiene potencial de exportar a Chile tapices para autos, papel, azúcar (para fabricar caramelos) naranjas (para hacer jugo) madera en troncos, aserrada o escuadrada, partes de muebles a medio terminar.

Además se podrían vender capelladas, cuero curtido y suelas de poliuretano para calzados o carteras, fibra sintética, artificial o algodón para prendas de vestir. Con dichas materias primas Chile tendría la posibilidad de fabricar el producto y exportarlo cumpliendo con las normas de origen establecidas por el TLC que firmó con Estados Unidos y acuerdos comerciales con países de la Unión Europea.

Desde Chile se descarta que se pueda utilizar el TLC que ese país tiene con EE.UU. para el complejo textil lanero pero sí podría utilizarse el de China. "Ahora viene un trabajo más fino, de ver las normas de origen de Chile para ver que es lo que permite" que pueda ser utilizado por empresas uruguayas para aprovechar los TLC de Chile, dijo a El País el presidente de la Corporación Nacional para el Desarrollo, Álvaro García. En el caso de la CND, propietaria de la textil Agolán, se comenzará con los primeros contactos con una empresa textil chilena, para evaluar posibilidades de complementariedad, agregó.

En el viaje que hará Vázquez a Chile, la CND buscará firmar un acuerdo con la Corporación de Fomento de la Producción de Chile para brindar apoyo a la complementariedad que pueda surgir entre empresas chilenas y uruguayas. Además también se firmarían convenios entre la Unidad de Apoyo al Sector Privado del Ministerio de Economía y la Comisión de Inversiones chilena y entre Uruguay XXI y ProChile.

margen. El TLC de Chile con Estados Unidos, en una gran gama de productos, tiene como exigencia que el 45% del valor sea de contenido regional, lo que genera un "amplio margen para incluir insumos uruguayos", dijo Baiertein.

Pese a ello, los chilenos ven un "gran potencial" en la exportación a Asia, particularmente a China en donde, por ejemplo, existe gran demanda de calzado de calidad.

"El negocio está en los rubros que puedan transformarse y al mismo tiempo cumplan con las normas de origen", dijo Baiertein. El empresario puso como ejemplo de hasta dónde puede llegar las posibilidades de exportación comentando que la empresa chilena CIC fue la que proveyó de insumos para muebles a la empresa ganadora para equipar la Casa Blanca en Estados Unidos.

oportunidad. Los intereses de Chile también pasan por la fauna local. El vicepresidente ejecutivo del Comité de Inversiones Extranjeras de Chile Carlos Mena afirmó a El País que Uruguay tiene gran variedad de peces que Chile no cuenta y que podrían criarse en ese país y colocarse en los mercados en donde venden salmón.

Los representantes chilenos dejaron claro que su interés es aumentar el volumen de productos para ampliar su cuota de exportación a China, Unión Europea, Estados Unidos en donde hoy no alcanza al 1% de las importaciones de esos países.

Asimismo, desde el sector privado se advirtió que "el tiempo es clave" y no se debe dejar pasar esta oportunidad porque "en esta competencia por llegar a los mercados internacionales hay otros que nos van a desplazar", dijo Baiertein.

Empresarios uruguayos y chilenos dejaron en evidencia ayer su desilusión respecto a las posibilidades del Mercosur al tiempo que el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, afirmó que el bloque es "muy cerrado al mundo" y que "ha tenido escasa capacidad para acordar con otros proyectos de integración".

Astori volvió a recalcar que Uruguay seguirá perteneciendo al Mercosur, pero que debe "estar más junto que nunca para proponer el acceso al mercado ampliado". El ministro resaltó la necesidad de "abrir el proyecto al mundo" y "encarar los serios problemas de integración del Mercosur".

El presidente de la Cámara de Industria, Diego Balestra, afirmó que "la política de inserción externa que ha promovido el Mercosur no ha contemplado los intereses de los socios de menor tamaño".

Para el sector privado chileno "el acuerdo con el Mercosur ha sido el que ha tenido menos significación económica para Chile", dijo Hugo Baiertein quien agregó que en 1996 cuando se firmó ese país exportaba a Argentina U$S 900 millones y hoy llega a U$S 700 millones y en algún momento U$S 580 millones. "Cuando suscribimos el acuerdo pensamos que iba a ser bastante mejor que lo que es ahora", agregó.