El gobierno inscribió un documento ante la SEC (el órgano regulador del mercado de valores de Estados Unidos) que le da la posibilidad de emitir deuda por hasta US$ 560 millones en el mercado internacional, el mismo día en que la calificadora de riesgo Standard & Poor`s (S&P) elevó la nota de la deuda uruguaya y la dejó a un escalón del grado inversor.
La inscripción ante la SEC es algo habitual y habilita a tener un cupo para emitir deuda en caso de querer hacerlo.
Si bien hoy no está prevista ninguna emisión internacional -el gobierno tiene caja como para enfrentar vencimientos de deuda este año, el próximo y parte de 2013-, el Poder Ejecutivo ha aprovechado a hacerlo cuando aparecen oportunidades ya que cuenta con los trámites adelantados.
Por su parte, S&P comunicó ayer que elevó de BB a BB+ la nota de la deuda uruguaya con lo que se ubica a solo un escalón del grado inversor. Además dejó la perspectiva de la misma en "estable".
El año pasado la agencia Moody`s había dejado a Uruguay a un escalón del grado inversor -lo que le daría mayor acceso a financiamiento y a un costo menor- y hace dos semanas se sumó la calificadora Fitch. En el gobierno confían en alcanzar ese grado.
El analista para Uruguay de S&P, Sebastián Briozzo, dijo a El País que tras esta suba, no se espera una "modificación inmediata" para Uruguay que le permita alcanzar el grado inversor. "Reconocemos que hay una tendencia favorable", señaló Briozzo.
Una nueva mejora en la nota de Uruguay dependerá de los "procesos" en materia de "política fiscal, crecimiento económico" y como ello pueda mejorar la sostenibilidad de la deuda, agregó.
En el comunicado que divulgó, S&P señala que "la disminución del nivel de deuda del gobierno y una participación creciente de la deuda en moneda local en el contexto de alto crecimiento económico podría crear la base para un movimiento al alza en la calificación". Agrega que "por el contrario, un aumento en las presiones fiscales que modifiquen significativamente el programa fiscal del gobierno podría llevar a una calificación más baja".
La agencia destaca que "las presiones políticas desde dentro del partido de gobierno continuarán" aunque no esperamos que afecten la dirección principal de la política económica, que sigue siendo fundamental para que Uruguay continúe ganando una mayor flexibilidad económica, soportar la creciente incertidumbre regional y mundial, y persista en un impulso hacia arriba de la calificación". Para S&P, la economía uruguaya crecerá 5,8% este año -el gobierno prevé lo haga 6%- y luego se expandirá entre 4% y 5% por año.