El Banco Central (BCU) decidió eliminar desde enero los francos suizos de las reservas de libre disponibilidad, a poco más de un año (noviembre de 2007) de haber decidido incorporar esa y otras monedas (euros y yenes) para diversificar su portafolio.
Fuentes oficiales dijeron a El País que la decisión de quitar esa moneda de las reservas responde a que el franco suizo es poco líquido al momento de disponer de él. Además, había un "problema impositivo", indicaron. Ya que el BCU tenía que pagar impuestos por los intereses que le generaban los francos suizos.
Por otra parte, con las reservas lo que se busca es estar "macheado" (es decir "calzado") de acuerdo a la deuda, por eso existen activos de reserva en dólares (la gran mayoría), en euros (cerca del 10% del total) y en yenes (menos de un 5%). Uruguay tiene deuda emitida en esas tres monedas pero no en francos suizos.
A diciembre del año pasado, había US$ 6.317 millones en total de reservas. De ellas, US$ 5.256 millones estaban en dólares, US$ 631 millones en euros, US$ 226 millones en yenes y US$ 205 millones en francos suizos.
Sin embargo, a enero las reservas habían pasado a US$ 6.202 millones, de las cuales US$ 5.358 millones estaban en dólares, US$ 615 millones en euros y US$ 227 millones en yenes. Los francos suizos fueron vendidos por dólares.
La parte de las reservas que no está en dólares (US$ 842 millones a enero), corresponde a las reservas de libre disponibilidad que excluyen los depósitos de bancos y de otros ante el BCU.
Los técnicos del BCU habían comenzado un estudio sobre modificación de reservas en los inicios de 2007, pero recién en noviembre de ese año estuvo listo y a mediados de noviembre de 2007 el directorio tomó la resolución de hacer el cambio. En el informe técnico no se incluía al franco suizo.