"Si ahí te ponés muy sentimental, perdés"

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C.B.

Malena Barrios, médico de familia, fue a fines de enero del año pasado a Haití con un grupo de uruguayos y extranjeros miembros de la ONG cristiana Proyecto América. "Todos los granitos de arena suman, y si todo el mundo pusiera uno, haríamos la diferencia", declaró a El País.

"El primer día fuimos con equipos de avanzada para ver en que situación estaba todo, para definir en que lugares podíamos trabajar. Ese mismo día visitamos algunos hospitales precarios que ya estaban funcionando y decidimos armar una clínica ambulante", relató Barrios, casi un año después de ese viaje a Haití.

El barrio donde se instaló junto con sus compañeros fue Cité de Soleil, el más pobre y soslayado antes del terremoto. "No sabíamos que era el peor, nos pareció que había muchísima necesidad. Estaban muy bien organizados, tenían un líder que nos aseguró que podríamos trabar tranquilos, y eso era lo que necesitábamos. Teníamos un equipo de médicos y otro de asistentes; éramos casi 100 personas", recordó.

Barrios, que con Proyecto América estuvo en varios países trabajando, destacó su paso por Haití como "una experiencia increíble". Pero hizo una aclaración: "Siempre digo que cuando estás ahí tenés que dejar un poco de lado la adrenalina y todo lo que te pasa, porque sino, no podés trabajar. Cuando volví a Montevideo y fui a un supermercado y vi fotos del barrio donde yo había estado, recién ahí sentí un impacto. Durante el tiempo de trabajo es difícil evaluar; si te ponés muy sentimental, perdés".

Una de las cosas que más impresionó a la médico fue la mentalidad de los haitianos. "Viven día a día, y si uno les soluciona ese día, ellos lo tienen ganado; no se van a morir", comentó.

Esta misma mentalidad, la de la lucha por la supervivencia, hace que entre ellos no se ayuden para salir adelante, según la doctora. "Por ejemplo, llegaban contenedores con ropa y ellos la vendían. En realidad no podían hacer nada con la plata que cobraban y tenían que guardar la ropa para cuando hiciera frío, pero ellos no piensan así. Nosotros pensábamos que el día de mañana la iban a precisar, pero los haitianos no: vivían el hoy, algo que es difícil de entender", concluyó Barrios.