Se mató el violador más buscado de Argentina

BUENOS AIRES n El sindicado violador serial de Córdoba, Marcelo Mario Sajen, murió ayer en el hospital Municipal de Córdoba, donde se encontraba internado desde la noche del martes último. Sajen, acusado de ser autor de más de medio centenar de violaciones, intentó matarse al pegarse un tiro en la cabeza cuando fue rodeado por la policía.

El hecho se produjo horas después de que el gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, y un grupo de fiscales abocados a la pesquisa anunciaran públicamente que el violador serial ya estaba identificado, en una conferencia de prensa en la que dieron a conocer su identidad y su fotografía.

Según informaron los investigadores, se cree que Sajen, de 39 años, venía cometiendo ataques sexuales desde hacía 12 años, y, anteriormente, en 1985, había sido condenado a prisión por el abuso de una menor. Era padre de ocho hijos, cinco varones y tres mujeres, y tenía aparentemente una doble vida: dos familias, con dos mujeres diferentes que se conocían entre ellas —dos hijos son con una mujer y seis con la otra—, y dividía su tiempo entre las dos, a las que alternaba con dos amantes ocasionales. Se dedicaba a la compra y venta de autos.

FAMILIA. Su drama alcanzó a su familia: en una sala común fueron asistidos su mujer "principal", Zulma Villalón —sufrió una crisis nerviosa luego de haberse enterado de que su marido era el hombre más buscado por la policía cordobesa y ya fue dada de alta—, y su hijo que, anteanoche, ingirió una sobredosis de psicofármacos para quitarse la vida. Como no lo consiguió, intentó arrojarse por una ventana de un piso alto del hospital, pero fue contenido. El estado emocional del chico era crítico y a ciertas horas del día ni las enfermeras ni el resto de su familia podían calmarlo.

Zulma Villalón estuvo con la policía y los funcionarios judiciales hace unos días. Por entonces, el sujeto estaba prófugo. Para desincriminarlo de las sospechas o por algún arreglo que ninguna fuente ha admitido, autorizó a que se le realizara un análisis de ADN a uno de sus hijos. El resultado fue una de las pruebas concluyentes para llegar a la identificación del violador serial.

Quien aportó la muestra de sangre sería el menor que intentó quitarse la vida.

PERDON. Villalón, por otro lado, le pidió hoy perdón a la sociedad cordobesa por los supuestos delitos cometidos por su marido y, tras solicitar que la respeten en su dolor, confirmó que fue ella quien colaboró con la policía en la última etapa de la investigación del caso.

"Quiero decirles que me respeten, tengo todo mi dolor, soy una buena persona, mi marido fue un excelente padre", señaló la mujer.

"Soy una persona normal, no soy lo que andan diciendo. Colaboré con la policía, no oculté ni oculto nada, quiero que me dejen darle un velatorio normal. Tuve 22 años de casada, fue mi pri- mer amor; por favor, déjenme en paz. A la sociedad, les pido perdón en mi nombre y el de mis hijos", agregó. "LA NACION"/GDA

Para las víctimas el violador "la sacó barata"

Ana, una de las víctimas del violador serial de Córdoba, se lamentó hoy porque la Justicia y la Policía "le dieron la oportunidad de elegir entre ir preso y pegarse un tiro" y, al suicidarse, dijo, "la sacó barata".

"Personalmente tengo sentimientos encontrados por lo que pasó", dijo durante una conferencia de prensa, y expresó sentir "alivio porque esta persona ya no esté circulando". "No era lo que esperábamos. Lo óptimo hubiese sido que fuera preso", sostuvo.

El fiscal que comandó la investigación en los últimos tres meses, Juan Manuel Ugarte, se hizo eco de la sensación de buena parte de la opinión pública argentina, que dice sentirse aliviada porque el violador haya caído, pero no por el desenlace.

"Obviamente que hubiera preferido llevar a esta persona a un juicio, porque estoy absolutamente convencido de que son numerosas las pruebas que permitirían un condigno castigo", dijo.

También se expresó en igual sentido el gobernador José Manuel de la Sota, quien aprovechó la ocasión para volver a mostrar dureza ante el delito. "Hay que poner leyes muy severas para aquellos que han delinquido, máxime en este tipo de hechos. Estos sujetos son irrecuperables", apuntó. Lamentó que Sajen no vaya a poder ser juzgado por los jurados populares que actuarán desde el 1º del mes próximo, una iniciativa del mandatario sancionada este año por la Legislatura y que fue apoyada por Juan Carlos Blumberg.

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