LANZAROTE | AFP
La militante que realiza una huelga de hambre desde hace un mes porque no puede entrar en su país fue enviada de regreso anoche, aunque se desconocen las negociaciones que llevaron a la solución del conflicto.
Anoche despegó en Lanzarote un avión que trasladaba a la activista saharaui Aminatu Haidar a la capital del Sahara Occidental, tras el anuncio de su leve recuperación en un hospital de la ciudad canaria.
La mujer realizaba una huelga de hambre desde hacía 32 días, cuando según las autoridades marroquíes renegó de su nacionalidad al llegar al aeropuerto de El Aaiún.
La activista no pertenece al Frente Polisario, que lucha por la independencia del Sahara Occidental, colonia española hasta 1975 y hoy administrada por Marruecos.
Durante este mes, el gobierno español ofreció a Haidar diversas posibilidades para que obtuviera un nuevo pasaporte o se quedara a vivir en España, pero la activista lo había rechazado, mientras Marruecos le exigía que pidiera perdón por haber renegado de su nacionalidad marroquí.
Anoche parece que las negociaciones llegaron a su fin, cuando el entorno de Haidar recibió una llamada de Pilar del Río, la esposa del escritor José Saramago. Ella había recibido una llamada del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunciándole un inminente traslado de la activista saharaui a la ciudad de donde fue expulsada.
Antes de salir del hospital rumbo al aeropuerto, Haidar dio una breve conferencia de prensa. "Esto es un triunfo del derecho internacional, de los derechos humanos, de la justicia internacional y de la causa saharaui", afirmó.
"Lo primero que voy a hacer cuando llegue será besar a mi madre y a mis dos hijos", añadió Haidar antes de partir a bordo de una ambulancia
Según la agencia Europa Press, la activista dijo no tener del todo claro cuáles fueron las negociaciones que permitieron su reingreso a Marruecos.
"Hasta el momento no tengo mucha conciencia, voy al avión, si me ocurre lo que ocurrió la otra vez no voy a bajar del avión y voy a acabar con agua y azúcar", dijo Haidar.
Según la misma fuente, que cita al portavoz de la Plataforma de Apoyo a Aminatu Haidar, Carmelo Ramírez, el Gobierno de Marruecos aceptó "sin condiciones" el regreso de la mujer, por lo cual no tendrá que pedir perdón al Rey de Marruecos ni reconocer públicamente su nacionalidad marroquí, tal como exigían distintas autoridades del reino. Ramírez dijo estar seguro de que no se le exigirá absolutamente nada a la activista, aunque desconoce la existencia de acuerdos políticos entre Marruecos y España o Francia.
En el avión acondicionado de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo viajarán también el médico de Haidar y director del Hospital Insular, Martín de Guzmán, y su hermana Laila.
Las últimas informaciones apuntaban hacia un pronto desenlace. El ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, había anunciado en el Congreso de los Diputados que seguía trabajando "pa-ra encontrar una solución definitiva para Aminatu Haidar" y que esperaba "en breve poder anunciar esa solución". Antes del fin de la sesión había debido retirarse porque el Ejecutivo estaba "desarrollando intensas negociaciones".