IRAK
Irak se sitúa en el puesto 157 (de 180) del índice sobre percepción de la corrupción del índice de Transparency International.
Las autoridades iraquíes investigan el "robo" de 2.500 millones de dólares del servicio de impuestos y extraídos de un banco público, indicaron las autoridades el domingo, último caso que ilustra el problema de corrupción endémica que sufre Irak.
Las autoridades no desvelaron la identidad de los responsables implicadoS. El sábado, la agencia de prensa estatal INA publicaba una demanda de investigación enviada por el ministerio de Finanzas a la agencia anticorrupción gubernamental, tras una investigación interna.
La petición alude al "robo de 3,7 billones de dinares iraquíes (unos 2.500 millones de dólares) de la Administración general de impuestos del banco Al Rafidain".
"No permitiremos que el dinero de los iraquíes sea robados", tuiteó el domingo el recientemente nombrado primer ministro Mohamed Shia al Sudani.
El cuantioso monto habría sido extraído entre septiembre de 2021 y agosto de 2022 mediante 247 cheques cobrados por cinco empresas, según la Administración general de Impuestos. El dinero fue inmediatamente sacado en efectivo de las cuentas de estas.
La agencia anticorrupción aseguró el domingo que remitirá toda la información al ministerio de Finanzas.
El exministro de Finanzas interino, Ihsan Ismail, que acaba de dejar el cargo, apuntó a "un grupo específico" como responsable del robo, sin dar más detalles.
Irak se sitúa en el puesto 157 (de 180) del índice sobre percepción de la corrupción del índice de Transparency International.
"La omnipresencia de la corrupción es una de las causas principales de la disfunción iraquí. Y honestamente, ningún dirigente puede afirmar que sea ajeno a esto", criticó a principios de octubre la emisaria de la ONU en Irak, Jeanine Hennis-Plasschaert.
Aunque se producen condenas, con frecuencia apuntan a cargos intermedios del Estado. El país, inmensamente rico en hidrocarburos, obtiene el 90% de sus ingresos de las exportaciones de petróleo.