Redacción El País
En medio del horror de la guerra, el Tribunal Supremo de Israel no deja de lado otros reclamos históricos de su población. Así, el órgano Supremo dictaminó ayer jueves que las parejas del mismo sexo puedan adoptar niños en igualdad de condiciones a las parejas heterosexuales, una decisión que se ve como “una victoria histórica” para el colectivo LGTBQI+ del país.
“Tras años de lucha, el Tribunal Superior de Justicia cancela la discriminación contra las parejas LGTBQI+” en el proceso de adopción”, celebró Aguda Israel, entidad representativa del movimiento LGTBQI+ que presentó un recurso ante la Justicia junto a la ONG Centro de Reforma y Casa Abierta para el Orgullo y la Tolerancia de Jerusalén.
“Es una victoria histórica y un logro revolucionario que aporta una gota de esperanza en estos días difíciles”, dijo Aguda a través de la red social X, donde aseguró que “por años ha estado luchando para que se considere iguales” a las parejas LGTBQI+ “a la hora de adoptar niños y formar una familia en Israel”.
Hasta ahora, la legislación establecía que sólo “un hombre y su esposa juntos” podían adoptar, y las parejas del mismo sexo podían hacerlo solamente bajo dos criterios excepcionales: si uno de los cónyuges era padre biológico del niño, o si los padres habían muerto y el menor a adoptar era un pariente, según el diario local Haaretz.
Ante ello, en su sentencia de ayer, el Supremo dictaminó que las parejas heterosexuales no tendrán prioridad en el proceso de adopción, en una decisión tomada de forma unánime que marca una nueva interpretación de la ley sobre el ámbito vigente desde 1981. Según Aguda Israel, la decisión es también una “respuesta a la homofobia y el odio” que relegó a los homosexuales a “ciudadanos de segunda clase”.
“Llegó el momento de la igualdad de derechos en la paternidad, la seguridad, el matrimonio, sin incitación ni discriminación, y seguiremos marchando con orgullo hasta llegar ahí”, agregó Aguda.
Israel es considerado como el país más abierto en la región hacia la comunidad LGTBQI+, aunque a su vez tiene sectores religiosos judíos fuertemente conservadores que se oponen a este colectivo, aún sometido a muchas limitaciones en cuestión de derechos civiles.
A su vez, la coalición de Gobierno de Benjamin Netanyahu, formada en parte por ministros de ultraderecha y abiertamente homófobos, es considerada de las más contrarias al colectivo LGTBQI+ en la historia reciente de Israel. Como antecedente al fallo de ayer, Israel eliminó en 2021 una norma de larga data que prohibía a los hombres homosexuales donar sangre. Hasta esa norma, estaba prohibido recibir donaciones de sangre de hombres que hayan tenido relaciones sexuales con otros hombres durante el año anterior a la donación. Desde entonces, el texto que aparece en el cuestionario de donación de sangre se refiere “tener relaciones sexuales de alto riesgo” independientemente de la orientación sexual y el género. [EFE]