Al presidente de Colombia, Gustavo Petro, le estalló un escándalo político donde menos esperaba: en su familia. Nicolás Petro, hijo del presidente, es por estos días el centro de una polémica por acusaciones de corrupción y vínculos con narcotraficantes. El propio Petro padre ordenó que investigaran a su hijo.
“Me encuentro en total disposición de comparecer ante los entes de control y ratificar mi inocencia (...) los dineros en cuestión no tienen procedencia ni de la mafia, ni de la corrupción, ni de ninguna actividad ilícita”, aseguró Nicolás Petro, diputado del departamento del Atlántico por el movimiento izquierdista que lidera su padre.
La exesposa de Nicolás Petro, Day Vásquez, lo acusó en una entrevista a la revista Semana de tener vínculos con narcos y contrabandistas, además de recibir dineros para la campaña electoral que en realidad usaba para pagarse una vida lujosa, según ella, a espaldas de su padre.
La revista Semana publicó la transcripción de conversaciones de Whatsapp entre la entonces pareja en las que hablan de movimientos de grandes sumas de dinero, la compra de una casa de campo por un valor equivalente a más de 330.000 dólares y tratos corruptos con ministros del gobierno.
En una de las transcripciones el hijo mayor del presidente asegura haber recibido del ministro del Interior, Alfonso Prada, diez “cupos” de trabajo para abogados de su círculo. Otros medios de comunicación publicaron extractos bancarios que dan cuenta de gastos mensuales superiores al salario de un diputado.
El jueves, antes de las acusaciones de Day Vásquez, el presidente pidió a la Fiscalía investigar a su hijo de 36 años y a su hermano Juan Fernando Petro para determinar si han ofrecido a narcotraficantes beneficios en el marco de las iniciativas oficiales de paz a cambio de dinero.
Nicolás Petro anunció en el comunicado que da “un paso al lado” de la política y la coalición izquierdista de su padre mientras se verifica su “inocencia”.
Plan “Paz total”, menos cárcel para narcos
El plan “paz total” del presidente Gustavo Petro, que se debatirá en el Congreso, ofrece beneficios penales y económicos para quienes abandonen el narcotráfico. El proyecto de ley establecerá penas máximas de ocho años y la posibilidad de conservar hasta un 10% de sus fortunas para los narcos que se acojan. Petro tuvo una semana turbulenta: una crisis de gabinete, la caída de su popularidad en las encuestas (40% de aprobación), la retención durante dos días de casi 80 policías por parte de campesinos en el Caquetá y el escándalo que enloda a su familia.
Lujosa vida
Además de las denuncias de corrupción y contactos con narcos, Nicolás Petro deberá explicar su nivel de vida. Por ejemplo, un penthouse de unos 522.000 dólares, la compra de costosas joyas y retiros bancarios de altas sumas de dinero en efectivo.
Así lo reveló este domingo la revista Cambio, que en un reportaje señaló que el hijo mayor del mandatario “lleva un estilo de vida que no parece corresponder a sus ingresos como diputado a la Asamblea del Atlántico”.
Según la investigación, que publicó un extracto bancario del político, en diciembre, Nicolás Petro tuvo gastos que incluyen compras en una joyería y de ropa de marca, tratamientos estéticos, restaurantes y millonarios pagos en hoteles de Barranquilla, capital del departamento del Atlántico.
El escándalo saltó el pasado jueves cuando el presidente colombiano publicó un comunicado en el que se refiere a “información que se rumora en la opinión pública” sobre su hermano Juan Fernando Petro Urrego y su hijo mayor, Nicolás Petro Burgos, por lo que pidió al fiscal general, Francisco Barbosa, “adelantar todas las investigaciones necesarias y determinar posibles responsabilidades”.
Petro hizo referencia a supuestas reuniones en cárceles donde, según algunas versiones, personas de su entorno estarían haciéndose pasar por miembros del Gobierno para contactar a criminales y ofrecerles su inclusión en el programa de “paz total” a cambio de dinero, una sospecha que recae en su hermano, pero a la que no fue vinculado su hijo.
Sin embargo, Day Vásquez, exesposa de Nicolás Petro, en una entrevista con la revista Semana, acusó al hijo mayor del presidente de haber recibido dinero del narcotraficante Samuel Santander Lopesierra, alias “El hombre Marlboro”, para la campaña presidencial de su padre que sin embargo nunca llegó a ese destino.
“Eso nunca llegó legalmente a la campaña porque él (Nicolás) se quedó con ese dinero, y así otros”, dijo Vásquez quien aseguró que Lopesierra le entregó al hijo de Petro “más de 600 millones de pesos (unos 124.700 dólares de hoy) para la campaña del papá” y que además recibió 200 millones de pesos (unos 41.500 dólares) del empresario Alfonso “Turco” Hilsaca que tampoco entraron a la campaña.
En base a EFE y AFP